En Manhattan: Se vende el apartamento de soltera de Cameron Díaz. A razón de algo más de 4 millones de dólares...
Un lujo de apartamento de dos habitaciones inmejorablemente situado y decorado.
No ha pasado ni un año desde que Cameron Diaz y el músico Benji Madden se casaran para sorpresa de todos en su mansión de Beverly Hills, California, y la actriz ha puesto en venta ese pisito de soltera de Nueva York. Como si la relación de pareja se le hiciera tan grande que no cupiera en ese pisito de tan solo dos habitaciones.
Y puesto en esto, mucho mejor para la actriz de Algo pasa con Mary una mansión en Beverly Hills que un piso en Nueva York, claro. El piso en venta en realidad está realmente bien situado, en pleno Greenwich Village, en la calle 12 entre la quinta avenida y la avenida Greenwich, cerca de Union Street, de Washington Square Park, del West Village o de The Farmer’s Market, pero sólo tiene 130 metros cuadrados. Exterior y orientado al sur, su precio de salida sin muebles es de 4.250.00 dólares, algo más de los casi 3.000.000 de dólares que pagó por él en 2008.
Pero el pisito, muebles o no, es mas que una propiedad bien localizada en Nueva York, está decorado por la célebre interiorista Kelly Wearstler, con todo lujo de acabados y materiales, y la actriz está dispuesta a recibir una oferta superior por incluir los muebles que decoran la vivienda en la venta, algo a estudiar dado el impecable y elegante trabajo de Wearstler.
Su recibidor es un largo pasillo de casi 4’5 metros, con acabados artesanales en yeso imitando a cuero negro, que da paso a un pequeño comedor más decorativo que práctico abierto al luminoso salón en papel pintado a mano, con chimenea de leña y armarios integrados y discretos. Desde el comedor se accede a una cocina con una decoración vintage un intenso verde esmeralda y una importante profusión de acabados y elementos en latón, como la grifería o parte de la encimera. Los muebles esconden una gran capacidad de almacenaje y una despensa extrapole.
La habitación principal es una suite completa, digna del mejor hotel, decorada con un estilo clásico, grandes armarios oscuros con perfiles dorados y tonos marfil, un delicado artesonado en oro y marfil, y un baño digno de los años de gloria de Hollywood, azulejos de cristal dorados de Ann Sacks y mármol para el suelo y para la gran encimera bajo la que se encuentra un gran mueble lleno de cajones y con el lavabo dorado encastrado.
La segunda habitación, la de invitados, tampoco lo hace mal, más luminosa, alegre y sobria, el techo se ha decorado con un papel pintado a mano, y contrasta con las bigas y los armarios pintados en oscuros. El baño de esta habitación es más pequeño y barroco, ónix rosa y mármol negro mate contrastan con las griferías en bronce envejecido, cobre y latón de Bates and Bates y Waterworks. La moqueta de las habitaciones cubren el acabado de los suelos originales de roble de toda la vivienda, pulidos, tintados en negro y encerados.
Por supuesto toda la casa está dotada de los imprescindibles de la domótica, persianas y luces se controlan con un equipo con pantalla táctil en cada espacio que tiene su panel principal en la entrada para encender, apagar o programar toda la vivienda al gusto.
Localización, decoración, estilo para una pequeña vivienda en lo más interesante de Nueva York y con una pequeña historia detrás: aquí vivió Cameron Diaz antes de casarse con aquel músico tatuado…