¿Lujo o narcisismo?
Kai-Uwe Hellmann investigador alemán experto en consumo explica por qué el eco lujo resulta a menudo narcisista.
Kai-Uwe Hellmann, sociólogo de la Universidad de Berlín y director del ‘Institut für Konsum- und Markenforschung‘ (Instituto de Investigación de Consumo y Marcas) asegura que el lujo, lo superfluo, lo especial era originalmente algo a lo que únicamente podían acceder unos pocos como la nobleza y la clase alta.
En la actualidad sin embargo, el lujo prácticamente se ha democratizado, señala el experto. Casi todo el mundo puede acercarse al lujo, pero evidentemente no todo el mundo se puede permitir un Rolls-Royce.
Hellmann señala que las capas superiores de la sociedad son siempre muy aficionadas a imponer nuevas modas y tendencias al resto de la sociedad. Opera una especie ‘Konsumavantgardismus’, que ya describió el filósofo y sociólogo alemán Georg Simmel en el siglo XIX y que consiste en que los ricos se pueden permitir el lujo de comprar todo, de recibir asesoramiento y fabricar productos de consumo hechos a medida, y en el momento en que estas tendencias las copia el ciudadano medio, los más acaudalados van en búsqueda de algo nuevo para establecer nuevamente una distancia con la población.
Actualmente en ciertas clases sociales a menudo todo lo que está hecho a mano se considera «lujo», hasta el pan de la panadería que lleva haciéndose igual desde hace 100 años. El lujo parece haberse convertido en una nostalgia retrospectiva.
“El retro chic esta impulsado dialécticamente por un cansancio, un cierto aburrimiento y la desilusión frente a lo común. Se bascula de un extremo a otro, en un momento la gente se interesa por el nuevo reloj de Apple, al siguiente desean pasar un fin de semana en una cabaña sueca sin electricidad. Pero vivir en una choza sin electricidad, sin ducha, calefacción, ni atención médica a menudo se trata únicamente de una tendencia narcisista”, asegura Kai-Uwe Hellmann.
¿Qué cómo será nuestro concepto de lujo en el futuro? Hellmann asegura “Tengo la impresión de que estamos desde hace algún tiempo en un período de estancamiento. El lujo se puede encontrar en casi todos los segmentos, incluso en el del papel higiénico”.