Por los pelos.

No te dejes engañar por su diminuto tamaño (apenas 6 cm.). Las mini de Tweezerman son implacables y no dejan que se escape ni un pelo vivo. Éstas son de la colección Mini Slant In the garden y están adornadas con tres insectos muy veraniegos: abejas amarillas, libélulas y mariquitas. La idea es que las lleve siempre contigo (todas sabemos exactamente para qué…). Gracias a su diminuto tamaño podrás usarlas con discreción en cualquier sitio y si algún mirón te las ve, seguramente no sabrá ni qué son ni qué estás haciendo con ellas. Son tan bonitas…

Cuestan 14,50 euros y la inversión merece la pena. Tweezerman fabrica, sin duda, las mejores pinzas del mercado: sus puntas ladeadas, perfectamente alineadas y limadas a mano logran arrancar todos los pelos desde la mismísima raíz.