Y de repente se hizo el glamour.

Brocados y oro. Esta es la combinación estrella con la que SUITEBLANCO pone fin a una temporada barroca, elegante y sobria a través de uno de los colores principales del otoño: el burdeos.

Pero si realmente hay una pieza clave, tanto en su última propuesta, Night Collection, como en el resto de la campaña, es el negro… en esta ocasión encargado de acompañar a los protagonistas del momento: los vestidos.

Siguiendo la filosofía de la marca y sin olvidar ninguna de las tendencias marcadas, SUITEBLANCO dibuja la silueta femenina a través de formas asimétricas o con el corte péplum sobre unos tejidos que hacen las delicias de las más ingeniosas. La top model Masha Novoselova, junto a Emilio Flores y los hermanos Puiggros, se encargan de desfilar con brocados, pallettes, transparencias en gasas o encajes e incluso tweeds decorados con hilos de lurex…

A estos materiales hay que incluirle los inolvidables detalles tan cuidados por la firma española, con sutiles remates de cadenas y, por otra parte, tachuelas y pedrería con los que conseguir un resultado brillante.

Todo un repertorio para acompañar las fechas más especiales del año… Esos momentos en los que el glamour se convierte en el gran protagonista.

SUITEBLANCO