Once del doce.

Hay días que marcan nuestra vida, y no hace falta que los apuntemos en nuestra agenda cada año, porque están ahí como con un post-it permanente de esos amarillo flúor. Pueden ser cumpleaños, aniversarios, el día que comenzaste a compartir tu vida con Brutus, un precioso bulldog francés, o cuando emprendiste tu carrera profesional. Y muchas veces esas fechas nos inspiran. Son la guinda al pastel de un buen proyecto.

Así fue como nació Once del doce, en un invierno que resultó un inmejorable punto de partida y que dio como resultado Rustic, su primera colección de pulseras hechas a mano, con sello made in Spain.

Ahora sus bolitas de piedras naturales, rematadas con pompones de gasa o seda, tienen compañía, el modelo Capri, una edición limitada algo más sofisticada, pero con la misma intención de color que tenía su predecesora.

Así que si te dejas seducir por los encantos de los del uno_uno_uno_dos,  ellos conseguirán vestir tu muñeca e impregnarte con la energía y la actitud positiva que han querido ponerse por bandera. Porque como reza uno de los claims de la marca: “se tan feliz que cuando otros te miren consigan ser felices también”.

Después no hay excusas. Sed felices queridos.

oncedeldoce.com cuenta además con Nieves Álvarez como madrina de la marca ¿se puede pedir más?