Sin heroísmos, por favor.

En “Escribir un Cuento” Raymond Carver referenciaba “Decía Isak Dinesen que ella escribía un poco todos los días, sin esperanza y sin desesperación. Algún día escribiré ese lema en una ficha de tres por cinco, que pegaré en la pared, detrás de mi escritorio… Entonces tendré al menos esa ficha escrita. “El esmero es la ÚNICA convicción moral del escritor”. Lo dijo Ezra Pound…».

Escritor y poeta estadounidense, más conocido por sus cuentos y relatos breves, Raymond Carver –1938 Oregón, 1988 Washington- contribuyó con su talento a la creación del movimiento literario “realismo sucio», siendo uno de sus máximos representantes. Relacionado, además, con el “minimalismo”, por su forma de escribir -escueto y moderado en palabras-, Carver relataba aspectos asiduos y triviales de la vida cotidiana. Para él, no había que acontecer momentos grandiosos y memorables a pulso y plumón. Lo importante, además de tener talento, es el alma que cada autor ponga en su obra. No sólo hay que saber contar las cosas, sino cómo contemplarlas.

“Sin Heroísmos, por favor” es, además de una de sus póstumas compilaciones de relatos de juventud, la exposición que el Centro de Arte Dos de Mayo codicia entre sus puertas. De igual nombre que la recopilación de Raymond Carver, en esta exhibición se reclaman los momentos íntimos y diarios del acto de crear. Compuesta por tres muestras individuales de temáticas muy diferenciadas, “Sin Heroísmos, por favor” queda bien hilada, ya que sus discursos parten de un mismo principio: la mirada de lo cotidiano. La triple muestra estimula esta reflexión a través de las acciones de Iván Argote “Un año al día”, la instalación de Sara Ramo y los vídeos de Teresa Solar Abboud.

Nota: Si naciste entre el 15 de marzo y el 20 de mayo, puedes celebrar tu cumpleaños, como parte del proyecto de Iván Argote “Un Año al día”,  en El CA2M.