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Las.
¿Cómo hemos llegado hasta aquí? Ser mujer hoy y cien años en femenino.
Sin la ardua tarea de algunas, yo ahora sería otra versión, y aunque esa versión le cueste a mi cabeza, al menos, que sea consciente del recorrido, y de lo que quede aún por ganar.
El Centro Cultural Conde Duque nos presenta “Ser Mujer Hoy” y “100 años en Femenino”, dos exposiciones organizadas, una por la Fundación Dexeus y, otra, por Acción Cultural Española, junto con el Ayuntamiento de Madrid.
En “100 años en femenino” se revisa el lugar que la mujer ha ocupado en España en el último siglo y cómo, a través de la reivindicación de sus derechos, llega a la igualdad de género y de oportunidades que practica hoy en día. Al Feminismo, uno de los movimientos sociales con mayor impacto social, cultural, político, económico e ideológico del siglo XX en pro de la mujer, le debemos buena parte de nuestra situación actual en la sociedad. Además, fue determinante para conseguir el sufragio universal –primero el femenino-, e influyó decisivamente en la teoría queer –lo que más me gusta es que habla de identidades sociales, no de géneros, todos igualmente anómalos-.
La exposición se vale de todo tipo de objetos -audios de radio, música, carteles, películas, documentales, fotografías, obras de arte, prensa, objetos cotidianos, textiles, recursos textuales…- para ofrecer un discurso expositivo cronológico muy completo y didáctico.
“Ser Mujer. Hoy” analiza, desde un punto de vista fisiológico, cómo la mujer enfrenta sus desafíos personales y los roles establecidos en una sociedad contemporánea que se ve favorecida por una constante evolución científica y tecnológica. Para que nos entendamos, todos los esfuerzos hechos hasta ahora vistos a través de una radiografía a color. La exhibición, cuyo núcleo es la Salud de la mujer, se estructura en dos bloques que quedan ligados entre sí: uno, que comprende las edades de la mujer, y el otro, que trata la sexualidad, la familia, el trabajo, la educación, la maternidad, el acceso a la información, la diversidad y la enfermedad.
Ambas exposiciones se complementan y ofrecen al espectador una toma de consciencia vital y generacional, bien cargada de datos muy interesantes.
