Moto: MV Agusta RVS#1. La primera de su nombre.

El 1 siempre ha sido un número especial. Eso de ser el primero da carácter, personalidad. Eso le sobra, por ejemplo, al modelo de MV Agusta surgido de la nueva división de la marca italiana RVS (Reparto Veicoli Speziale), cuyo objetivo es análogo al de tantas secciones desarrolladas en los últimos tiempos por fabricantes de coches: realizar ediciones especiales exclusivas que den imagen de marca y que a la vez satisfagan el apetito de compradores con sangre de coleccionista. Su primera creación se llama MV Agusta RVS#1, de los 1 de toda la vida.

Completamente montada a mano, la RVS#1 es un desarrollo de la Brutale Dragster, llevada hasta los límites en colaboración con el Castiglioni Research Center (CRC). El chasis es de acero, multitubular, mejorado con pletinas laterales de aluminio procedentes de la industria aeronaútica. Tanto el depósito de combustible como el asiento han sido fabricados para ofrecer la máxima efectividad ergonómica, usando placas de titanio en el primero y un exclusivo cosido de panal de abeja en el segundo.

De la iluminación de la carretera se encarga la tecnología LED adaptativa, cambiando según la inclinación y giro de la moto, con el añadido de dos faros supletorios en el lateral derecho accionados desde el manillar, cuyos componentes también han sido exclusivamente desarrollados para la MV Agusta RVS#1 por CRC.

El motor es un tricilíndrico de 800 cc optimizado para llegar a los 150 CV, que seon transmitidos a la rueda trasera controlados con una caja de cambio que también ha sido mejorada, de la misma manera que la reducción de peso al utilizar materiales más ligeros y resistentes convierten a la RVS #1 en una máquina absolutamente impresionante que sin embargo, aún puede mejorarse mediante la instalación de un Kit desarrollado específicamente para llevarla hasta prestaciones de competición.

La MV Agusta RSV#1 es una moto única, de lo que da fe la placa de titanio que cada unidad llevará con el número de serie grabado en ella. Podríamos identificar así cada una de ellas, si es que tenemos la suerte de verla parada. Porque sobre el asfalto… no nos dará tiempo.