Los siete jardines de tu casa de verano en Cádiz.

La arquitectura es un arte que se inspira en los espacios del mundo, en los lugares en los que se ubica y en los que crea hogar; sólo un arquitecto que entiende así la arquitectura puede crear una casa como la de los Siete Jardines en Sotogrande, Cádiz.

Se trata de una vivienda que nace con la premisa de ser discreta, de no desdibujar el entorno natural en el que se asienta sino con el ánimo y el deseo de integrarse en él; esa es la razón por la que esta casa no es blanca, como tantas en las zonas circundantes, ni tampoco tiene un diseño al uso; se trata de una vivienda que ocupa una gran parcela en la Sierra de Grazalema, rodeada de un bosque de encinas y alcornoques y con vistas de Sierra Nevada al norte de África, la casa de los Siete Jardines se esparce creando 7 espacios naturales diferentes y, entre unos y otros, un interior sencillo, elegante, funcional, acogedor y de una belleza incuestionable.

Lo cierto es que esta casa parece conjurar el número perfecto, el siete, un número sagrado y mágico para la humanidad pues ha sido así considerado no por una ni dos culturas sino por otras muchas; la razón de este buen concepto del siete cuentan que hay que buscarla en el cielo, en las 7 únicas estrellas que los antiguos astrónomos descubrieron que se movían respecto a las demás, el resto no lo hacían; de este modo 7 fueron cosas tan dispares como los días de la semana o las vidas de un gato, las maravillas del mundo o los enanitos de Blancanieves, los siete sabios de Grecia o los siete samuráis y los siete dones del Espíritu Santo -sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios- en contraposición a los siete pecados capitales -soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza-.

Monte arriba, en la Sierra de Grazalema, mirando al mar y al cielo -a la costa de Cádiz y las cumbres de Sierra Nevada-, en un entorno natural y adorando al número siete… la casa de los Siete Jardines se convierte así en un sueño y un deseo, en un hogar a las puertas del cielo. En Cádiz.