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El 111 de la calle Murray a 198 metros de altura. 1
111 Murray. Un edificio en Tribeca, Nueva York, para vivir como Olivia Palermo, Taylor Swift o Robert De Niro.
El 111 de la calle Murray, viviendas de lujo y vanguardia a 198 metros de altura sobre el barrio de Tribeca.
Tribeca fue, hace unos 10 o 15 años, un barrio industrial de Nueva York pero todo cambia, también las ciudades, y hoy en día se trata de un barrio vivo y moderno, lleno de galerías de arte, tiendas y restaurantes e incluso con su propio festival de cine -el festival mundial de cine de Tribeca inaugurado por un vecino del barrio: Robert De Niro-. Pues bien, hoy paseamos este barrio neoyorquino para descubrir un nuevo y espectacular edificio casi circular y coronado, en el 111 de la Calle Murray.
Se trata de un edificio lujoso y vanguardista con servicios exclusivos para sus habitantes, para que te hagas una idea, un apartamento de un dormitorio ronda puede costar unos dos millones y medio de dólares y alguno de sus pisos más imponentes, como uno de 5 habitaciones y 6 baños en el piso 61 de los 64 que tiene el edificio, supera los 18 millones.
Kohn Pedersen Fox Associates son los arquitectos responsables de esta escultórica torre; con 64 alturas y envuelta en vidrio ofrece espectaculares vistas de la ciudad y del Río Hudson. Acero, vidrio soplado y mármol travertino son los materiales que dar forma a un vestíbulo bello y acogedor que se convierte en la puerta de entrada al paraíso…
El paraíso son las residencias diseñadas por David Mann, que tenía el reto de vestir el interior de unas viviendas de inmensos ventanales y que lo ha hecho con la funcionalidad, sencillez y belleza propia de este edificio. Los baños revestidos de mármol travertino y con una moderna bañera ubicada junto a la ventana son un detalle de elevado hedonismo.
Las zonas comunes de este espectacular edificio son también de lujo: piscina, jacuzzi, gimnasio, zona de spa con baño turco… todo lo necesario para cuidarte y mimarte sin medida.
111, que no es ciento once sino one eleven, amenaza con convertirse en uno de los edificios más exclusivos de Nueva York en un barrio en el que las naves industriales se han ido convirtiendo en lujosos lofts o en negocios de diseño industrial que han hecho de Tribeca el lugar de moda de la ciudad.
