Un apartamento a orillas del Támesis.

El estilo de vida urbano va más allá de nuestro asfalto de cada día, se hace notar no sólo en nuestro modo acelerado de vivir, sino también en cómo vestimos, en los lugares que elegimos para quedar a comer o para tomar un café, en los complementos de esa vida que definimos como urbanita… en todo, también en nuestro hogar.

Y precisamente por eso, porque el estilo urbano se presenta también en el ámbito del interiorismo y la decoración, nos dejamos llevar por Boscolo -una firma arquitectónica e interiorista londinense- a un apartamento a orillas del Támesis y nos instalamos en él descubriendo cada detalle para concluir que la decoración más urbanita es funcional, de líneas depuradas, elegante y muy loff.it.

La ubicación de este ático de tres habitaciones no puede ser más espectacular ni más tentadora para un alma urbana: Londres, una de las ciudades más cosmopolitas del mundo a la que, en este sentido, probablemente sólo Nueva York haga sombra, y, en Londres, Canary Wharf, un complejo de negocios ubicado junto al que fuera un importante puerto de entrada y salida en el comercio marítimo con nuestras Islas Canarias, es además el lugar en el que están las tres torres más altas de todo el Reino Unido con el permiso del rascacielos The Shard.

Ahí, en ese corazón urbano y empresarial, descubrimos este soberbio ático que fue reformado por Boscolo a petición, claro está, de su dueño.

Tratando de evocar un interiorismo propio de los paisajes marinos desde una óptica moderna, funcional y carente de la dulzura que destilan los paisajes florales tan del gusto british, el ático se decora en tonos grises y azules; la madera se envejece y se concede protagonismo a la espectacular iluminación natural de la que dispone el apartamento.

Espectaculares lámparas, cortinas minimalistas para que cumplan con su función sin interferir lo más mínimo ni en la luminosidad ni el resultado final de la decoración, contrastes en blanco y negro tanto en el dormitorio como en el salón y en las sillas del comedor y múltiples detalles decorativos, tanto en la cocina como en el resto de la casa, propios del diseño nórdico; lo más moderno y sorprendente cabe que sean tanto la cocina como el baño, ambos espacios protagonizados la madera en su tono más oscuro.

Éste es, sin duda, un diseño de lo más urbano a pesar de su inspiración marinera y también de lo más propio para el lugar del mundo que ocupa.