A las niñas les gustan las flores. Y Pale Cloud.

A las niñas les gusta vestirse de rosa, los detalles florales y los trajes de hadas y princesas, porque a las niñas no es que les gusten los cuentos, es más bien que los sienten y los viven como si de su propia historia se tratara porque, cuando no levantamos más que unos palmos del suelo, la imaginación baila al son de los deseos convirtiendo la realidad en mera anécdota.

Hay firmas que entienden esta ecuación de modo perfecto y crean colecciones que parecen hechas para bailar los sueños y los cuentos; una de esas firmas es Pale Cloud, un sello noruego con base en Oslo que ya nos conquistó con su invierno y que con su primavera despierta en nosotros más y más ganas del mes de las flores, el bello y florido mayo que nos regalará el sol y la calidez que hoy añoramos. Será una primavera que, para las niñas, vestirá en noruego porque vestirá Pale Cloud.

Las propuestas de Pale Cloud se toca con flores, con mucho nude, algún lazo, vestidos, dos piezas e incluso algún mono; se viste en tonos frescos y naturales entre los que se cuela un verde oliva que no hace sombra el color que roba el corazón de las niñas, el rosa. Se trata de una colección en la que salta a la vista la calidez de los tejidos y la funcionalidad de los cortes, además de la belleza del resultado que, en campaña, lleva las flores a modo de sombrero.

Si buscas un vestir diferente, tan romántico como infantil y encantador, para las más pequeñas de la casa, no dejes de adentrarte en el universo noruego de Pale Cloud… y hazlo sabiendo que no podrás evitar caer rendida a la magia y la dulzura que revolotea alrededor de sus propuestas.