Ella, una joya, una madre.

Una madre no es solo una joya, sino más bien un auténtico tesoro. Un tesoro repleto de abrazos, consejos, besos y un amor infinito que es prácticamente imposible describir con palabras. Pero sí se puede asemejar, aunque sea solo un poco y durante un instante efímero, a la belleza que tiene una joya.

Pandora, una firma femenina y con una gran sensibilidad, sabe el valor de encontrar una pieza que represente el inmenso cariño de una madre. Por eso, de entre todas sus colecciones, ha rescatado una selección de joyas que se convierten en amuletos y recuerdos familiares.

Anillos que bien podrían ser encaje de delicada plata de ley, charms para las pulseras con forma de corazón, colgantes decorados con un elegante micro pavé de circonitas y una colección de joyas con un punto nostálgico y también bello, dignas de pasar de generación en generación.

Pandora apuesta también por piezas que llevan rosas como protagonistas, inmortalizadas en un esmalte rosa pastel, etéreas, y para siempre, como el amor de una madre.