Vuelven las divas, vuelve el bañador.

Gafas panorámicas, pamelas alargadas, cuellos halter, años cincuenta, divas de Hollywood, carmín, gins sin tonic, glamour del bueno (del de entonces). Sensualidad a borbotones, de la que emanaba Rita Hayworth al quitarse un guante, de la que desprendía Ava Gardner con su tupé a un lado. Y laca, mucha laca. Eran otros tiempos, eran otras bellezas, esas que hoy recupera la firma de lencería y baño I.D. Sarrieri, transportándonos a aquella elegancia de ayer, desteñida hoy a base de papel cuché y teleobjetivos entrometidos.

Con todo ello aunque sin aquellas grandes musas, la marca nos propone para este verano bañadores de aires retro, que emulan al mítico LBD (Little Black Dress), con detalles en cristales Swarovski a la cintura, copas redondeadas y cuellos halter que enmarcan con gracia los hombros. De las prendas de baño más minimal a las más futuristas, esas que simulan transparencias y geometrías imposibles a golpe de modernismo casi arquitectónico.

La firma repite fórmula que tantos éxitos le ha dado desde sus inicios a principio de los noventa: sofisticación, sensualidad y tejidos de gran calidad. Su gran apuesta para esta temporada son los bañadores, prenda clásica donde las haya que no debiera faltar en las maletas este verano. Regresa así la elegancia clásica a las playas, vuelven las divas a las costas.