Empedrada.

Pintura lisa en tostado, beige, blanco, amarillo o color garbanzo; bicolor, papel, vinilos e incluso murales; cuadros, fotos, láminas, espejos, cortinas, cajas y otros detalles… ¿por qué no empedradas? hablamos de paredes y también de las ventanas.

No hace mucho hablábamos de la piedra luminosa de Lithos Design y ahora de Drappi di Pietra, a cuenta del reconocimiento recibido por esta colección en Londres –International Design & Architecture Awards 2013-.

Drappi de Pietra -cortinas de piedra- se inspira en los volúmenes de los teijdos que visten nuestras ventanas, desde los más vaporosos hasta los más densos pasando incluso por la rectitud de los paneles japoneses. La colección se compone de cinco diseños en piedra, de diferente tonalidad, forma, volumen y textura pero siempre en piedra, en la piedra que trabaja con maestría la firma italiana y que distribuye en Inglaterra otro nombre a seguir en esto de la vanguardia en la decoración de interiores: Fameed Khalique.

Tulle, organza, chiffon, ottoman y foulard son los nombres que refieren las cinco propuestas de esta colección y en ellos confiesan ya la inspiración en tela a la que recurrió su diseñador, Raffaello Galiotto. La piedra -mármol de Carrara- se viste en la calidez de los tejidos en formas sensuales y bellas que confieren un nuevo aspecto a los espacios cuyas paredes recubren.

He aquí una colección que demuestra que hay otro modo de decorar la pared… empedrarla.