The House in a Garden Una casa inimaginable en el corazón de Londres.

The House in a Garden es una casa vanguardista con techo de cobre y plantas subterráneas iluminadas con luz natural.

Las ciudades no son nunca lo fueron aunque en su arquitectura encontremos su historia escrita en madera, hormigón y piedra, esa es la razón por la que cuando nos ponemos a caminar por las calles de cualquier ciudad nos sorprendemos ante construcciones modernas y vanguardistas, ante otras históricas y ante algunas que no son lo uno ni lo otro o que son ambas cosas a la vez, algo así es The House in a Garden en Notting Hill, una casa construida sobre los restos de una vivienda del S.XIX con una visión arquitectónica de pura vanguardia.

Lo primero que nos sorprende de esta casa es lo que vemos de su exterior, su techo es de cobre, luce una forma inimaginable y termina con un gran tragaluz; pero las sorpresas no acaban ahí, su interior es todo un alarde de soluciones arquitectónicas porque los juegos de luz y sombra que combina son realmente espectaculares; en su nivel a pie de calle la casa se organiza entorno a un jardín interior pero eso no es lo más sorprendente, lo más llamativo de esta casa es que cuenta con dos pisos inferiores que son subterráneos y cuentan con luz natural ¿cómo es posible? gracias al estudio precio que los arquitectos del estudio de Gianni Botsford hicieron de la orientación de la vivienda y las posibilidades de su tejado, los tragaluces y ventanas de la parte superior llevan luz natural hasta las dos plantas inferiores, en la primera de ellas, justo bajo el suelo, están los dormitorios y la cocina (una cocina de espectacular diseño, decorada con mármol de Carrara y detalles en cobre), mientras en la planta más baja está la piscina.

La madera, que es de abeto, es el elemento protagonista del interiorismo de esta casa más allá de los juegos de luz y sombra, los detalles en cobre le dan un interesante toque de modernidad y vanguardia y, lo más sorprendente ¿sabes dónde está esta magnífica casa? en el corazón de Londres, en Notting Hill… porque no todo en Londres son grandes rascacielos, edificios de lujo o casas victorianas.



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Pequeños caprichos que ponen un toque de confort en nuestra rutina. Objetos de mesa o decoración que nos hacen sonreír de puro placer estético y sin los que ya no podríamos estar.

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