La casa del molino.
La mill house proyectada por el estudio wingardhs, es la materialización del sueño sueco.
La tradición de la sauna está muy arraigada a la cultura sueca, donde desde hace muchos años, el lugar destinado a dichas actividades era considerado un espacio sagrado ubicado en el patio de las casas. No en vano realizar una sesión de sauna está regida por una serie de normas y tradiciones, que señalan el recogimiento y el silencio, como elementos indispensables para la misma.
La mill house proyectada por el estudio wingardhs, es la materialización del sueño sueco de una vivienda apartada en un hermoso paraje natural, junto con los espacios requeridos para llevar a cabo el ritual de sauna y baño. Un lugar para romper la rutina del trabajo semanal y refugiarse en la más absoluta intimidad.
El pequeño molino reconvertido en vivienda, se situaba junto a una antigua granja al sur de Suecia, y estaba abastecido por un arroyo de escaso caudal. Dicho espacio se transforma en una vivienda con los espacios necesarios para la sauna, los cuales incluyen: vestidor, espacios de baño, zona de relax, y finalmente una pequeña piscina en el exterior capaz de recoger el agua del arroyo y acumularla para favorecer el baño frío, tan común después de la sauna.
Como es frecuente en Suecia todo el trabajo interior de madera es excepcional, y se encarga de dar calidez a todas las estancias anexas a la sauna, las cuales además pueden llegar a estar a la intemperie. Porque si algo tienen en Suecia, es el cariño al trabajo bien terminado y al detalle, a parte claro está del amor a las saunas. Por cierto ¿alguien se apunta a celebrar fin de año en una de éstas?
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