El Teatro Real tiene un desván lleno de juguetes.

Basado en las obras de Debusy La boîte à joujoux, The children’s corner y Le petit nègre, Etcétera convierte la Sala Gayarre en un lugar mágico donde los juguetes cobran vida.

Existe en el Teatro Real un rincón escondido donde duermen los juguetes. Claro que eso ocurre durante el día, mientras visitantes, curiosos y espectadores deambulan por los camerinos y las salas de ensayo, cotillean entre bambalinas y se dejan seducir por las máscaras, pelucas, vestidos de época y demás fascinantes objetos empleados en la escena.

Es al atardecer, en tanto el horizonte engulle los últimos trazos de la luz madrileña, cuando los juguetes comienzan a desperezarse. Lejos de las miradas indiscretas saltan de sus viejas cajitas de cartón y amparados por la noche azul marino comienzan su particular fiesta. Marineros y soldados, policías y vaqueros, payasos, elefantes, ositos de peluche y toda una corte de muñecas, colombinas y polichinelas contemplan la música de las estrellas y el ocaso de los telones. Es entonces cuando la vida despierta en el desván de los juguetes.

Sí, sí, suena un poco a Toy Story, pero la historia no es nueva. Ya en el 1913, el compositor Claude Debusy escribió para su hija Chouchou una obra musical basada en la bella historia de amor de una muñeca bailarina, su vals clandestino entre los brazos de un payaso canalla y un soldado perdidamente enamorado de ella y su danza. Pero salió el sol y se acabó la magia. Los juguetes volvieron a las cajas y ahí quedó la cosa. Hasta que otra noche mágica, un ejército de soldados se lanzó a la batalla contra los malvados polichinelas. Tras la lucha, el soldado de madera enamorado quedó herido en el suelo. La muñeca lo recogió, lo curó y abandonó para siempre al payaso impostor.

La compañía de títeres Etcétera recupera diversas obras de Claude Debusy para construir un espectáculo que evoca la fuerza de los objetos, el valor de los recuerdos y el juego. Un cuento clásico con piano y marionetas, inspirado en el universo de los juguetes, la ternura, la infancia y la memoria familiar.

La compañía granadina Etcétera, fundada en 1981 por Enrique Lanz y Fabiola Garrido, se ha consolidado como una de las más reconocidas internacionalmente. La excelencia y versatilidad de su trabajo la han convertido en un referente de calidad dentro del teatro de títeres contemporáneo español. El montaje cuenta, además, con la maestría del pianista Alexis Delgado.

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Basado en las obras musicales La boîte à joujoux, The children’s corner y Le petit nègre, de Claude Debussy, la compañía de títeres Etcétera convierte la Sala Gayarre  del Teatro Real en un lugar mágico donde los juguetes cobran vida.
Se ofrecerán ocho funciones familiares los fines de semana del 18-19 y 25-26 de noviembre, en sesiones dobles a las 12.00 y a las 17.00 horas.

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