Mauco Sosa. Poeta gráfico.

Se define como un artista visual multiusos, y damos fe de que el título le hace justicia. Su imaginación no tiene límites, cuanto más absurda y alocada sea la idea que le planten de frente, más ganas le darán de lanzarse al proyecto. El desafío, hoy más que nunca, está claro: expresarse con voz propia, inventar algo, si no nuevo, diferente, esencial, único y con un sello personal. Mauco lo ha conseguido, tiene esa estrella, ha reunido, con la suma del trabajo y cierto don, un caudal irrefrenable de creatividad que para gloria de todos, consigue encauzar y transmitir en sus dibujos, ilustraciones y obras.

Tres pasiones empujan su día a día: imaginar, cambiar y crear; y aún pareciendo, por tanto, un día a día emocionante y activo, por lo visto la profesión propone una rutina sedentaria y tranquila en la silla del estudio, frente a la pantalla del ordenador.

Ha elegido el diseño gráfico como campo de batalla por la importancia del continente frente al contenido, es decir, por darle peso y cierto poder a la forma del mensaje, al recipiente, al soporte, que evidentemente, también tiene mucho que decir.

Nació lejos de aquí, más o menos a unos 10.000 kilómetros a mano izquierda, en la hermosa y argenta ciudad de Mendoza. Estudió Artes Visuales, y comenzó a trabajar en prensa desde muy joven con sus ilustraciones. Desde entonces, todo ha seguido un curso fluido y natural. “Me gusta cambiar de espectros y explorar cosas nuevas, por eso mi trabajo se ha vuelto versátil e investiga dentro de varias disciplinas. Supongo que todo es resultado de una inquietud permanente.”

Amante de las más grandes personalidades creativas, nos habla de Fellini, Nietzsche, Won Kar Wai, Chris Ware y Shaun Tan, como referentes en los que clava la mirada.  “Siempre hago un esfuerzo para encontrar mi propia identidad, por lo que necesito mantener una distancia prudente con mis influencias. Y, si es necesario, luchar contra ellas.”

Antes de conocer el nombre de su blog: poetagrafico.com, ya habíamos titulado este artículo así, lo crean o no. Y es que no hay forma mejor de definir la labor de Sosa.  La poesía, la palabra y lo escrito tenían que aparecer por algún lado, dando sentido, fuerza y movimiento a sus creaciones. Ha realizado historietas y tiene entre manos un suculento proyecto que aunará poesía e imagen y que verá la luz este recién inaugurado 2013.  Además, le gusta, palabras textuales, y pensamos injustas: “coquetear” de vez en cuando con el arte contemporáneo, realizando obras y exposiciones periódicamente, dentro y fuera de nuestras fronteras.

Enamorado del presente y valiente ante la hoja en blanco que es el futuro, busca afianzarse como ilustrador, tanto en el ámbito de la publicidad como en el mundo editorial, y, si sobraran fuerzas, darse un buen paseo por la novela gráfica. En absoluto ambiciosos planes si observamos lo talentoso del joven y tranquilo Sosa.

¿Qué le pides a la vida? Justamente eso, que sea vida, que sea larga y que siempre sea una aventura.