Receta: Callos a la madrileña. Receta paso a paso.
Fuertes, bravos y con carácter.
Vuelve el frío para despedirse hasta el próximo invierno, y que mejor manera de decirle adiós que preparar unos fantásticos callos.
Este suculento plato típico de nuestro querido Madrid, está elaborado principalmente con tripas de vaca o carnero, lo que hace que sea rechazado por muchos a la vez que idolatrado por otros. Entre sus propiedades nutricionales, cabe destacar su alto contenido en hierro, magnesio y vitaminas B5.
A la hora de comprarlos asegúrate que sean frescos. Un lugar donde puedes encontrarlos siempre recientes, blancos y relucientes, es en el Mercado de Barceló de Madrid. Antonio Marugal, segunda generación de carniceros y ganaderos, cría y alimenta sus vacas, chotos, ovejas, cerdos… en un pequeño pueblo de la provincia de Toledo, Menasalbas. Sus animales crecen rodeados de atenciones y cariño para ofrecer a sus clientes la mejor calidad. Y eso, indiscutiblemente se nota nada más obsevar su puesto 311. Así que, no dudes en visitarle para adquirir unos fantásticos, estupendos y fresquísimos callos.
¡Y ahora vamos a cocinarlos!. Y que mejor manera de hacerlo, que como los cocina mi madre. No hay manos que preparen mejor esta receta que las suyas. Excelente cocinera y mejor madre, hoy intentaré hacerlos para todos vosotros siguiendo sus sabios y maravillosos consejos.
Receta paso a paso: Callos a la madrileña.
Fuertes, bravos y con carácter.
Ingredientes para 6 personas: 1 kilo de callos ½ kilo de morro, ½ kilo pata, 250 gramos de jamón serrano en tacos, 1 chorizo de cantimpalo, 1 morcilla asturiana, 2 zanahorias, 2 hojas de laurel, 3 dientes de ajo, 1 cebolla, 1 chile rojo, 1 cebolla, 2 cucharadas de pimentón, sal, 4 clavos, granos de pimienta y aceite de oliva.
Cúbrelos de agua y cuando comience a hervir elimina con ayuda de una cuchara todas las impurezas que saldrán a la superficie en forma de espuma.
Cuando deje de espumar retira el agua y pon agua limpia. Esta vez no los cubras, porque al cocinarse sueltan mucha agua.
Añade el jamón, las zanahorias, la cebolla claveteada, unos granos de pimienta y el laurel.
Cocina durante 4 horas a fuego medio alto.
Si no tienes tanto tiempo, puedes utilizar una olla rápida. Cuando la olla avise que ha llegado al máximo de presión, baja el fuego y cocina durante una hora y media.
Pica los ajos y el chile. Si no te gusta muy picante retira algunas semillas, ya que es donde se concentra el picante.
En una sartén añade cuatro cucharadas de aceite de oliva y fríe los ajos junto al chile. Cuando estén dorados añade el pimentón.
Incorpora a la cazuela y deja a fuego medio unos minutos más. Comprueba que tus callos están tiernos. Si no lo están, cocina durante más tiempo hasta conseguir el punto perfecto.
Déjalos toda la noche al frío para que la grasa suba a la superficie y retírala a la mañana siguiente con una cuchara. De esta manera os evitaréis un montón de calorías y haréis de esta receta un plato mucho más saludable.
Ingredientes
- Ingredientes para 6 personas
- 1 kilo de callos ½ kilo de morro
- ½ kilo pata
- 250 gramos de jamón serrano en tacos
- 1 chorizo de cantimpalo
- 1 morcilla asturiana
- 2 zanahorias
- 2 hojas de laurel
- 3 dientes de ajo
- 1 cebolla
- 1 chile rojo
- 1 cebolla
- 2 cucharadas de pimentón
- sal
- 4 clavos
- granos de pimienta
- aceite de oliva.