El abrazo del invierno
No sentía el abrazo de sus ropas ... y esa ausencia del cariño de los tejidos era de todo punto insoportable...
No sentía el abrazo de sus ropas … y esa ausencia del cariño de los tejidos era de todo punto insoportable, aceptaba dejarse envolver por las telas y lanas ante los fríos invernales pero exigía a cambio el amante abrazo de su envoltorio.
Decidió echar a un lado la pereza, y aprovechar los claros que se abrían en el cielo para regalarse una tarde en busca de sensaciones que terminaban en abrazo … una tarde de compras de las de antes, de las de calles atestadas de gente y tiendas, grandes y pequeñas, pero siempre con algún tesoro escondido, cosas bellas y útiles.
Se regaló sensaciones de los pies a la cabeza … unas deportivas únicas y al gusto, unos vaqueros que saben lo que se hacen, el inevitable punto de lana que acaricia el sentir en la piel y se tiñe de colores cálidos y vivos levantándose en armas contra la grisura del invierno … al abrigo del frío y de la lluvia.
No olvidó detalle alguno, un toque especial en el pelo, un aroma rebelde, unos gemelos divertidos quizá para él … o no, una nueva caricia, ésta de té verde y caléndula y una maqueta … de papel … nunca había hecho ninguna y estaba en su lista de «cosas que hacer antes de los 40».
Disfrutando un café, de los que se llevan, paseó cargada con sus tesoros dejando que la vida a su alrededor invadiese la suya … viendo en los demás lo que ella no era ya … o todavía … o quizá no llegara a ser nunca … niños, madres, adolescentes trasnochados … un mimo en una esquina y no lejos una mujer con su guitarra cantando en francés … unos con prisa, otros con pausa … y un matrimonio, supuso, ya mayor cogidos del brazo, sosteniéndose uno al otro … bullicio, olor a asfalto … No era idílico, era la gran urbe y, aún a pesar de sus miserias, la adoraba.
La placentera sensación de sentirse en su rincón en el mundo contrastaba con la amarga certeza de saberlo a él lejos … la vida y sus matices, un relato intenso dibujado trazo a trazo con una infinita paleta de colores … Sonrió pensando en todas las letras pendientes y en los colores que usaría para dibujarlas …
Life Looks Good