Ella, que todo lo tuvo.
Así es Ella, sin nombre, buscando la palabra perdida y la identidad de su vida; intentando restaurar libros arrasados y anegados. Un icono del idealismo.
La novela viene a ti…
Ocurrió que una noche, en Florencia, alguien vio entrar en un bar a una mujer misteriosa, con sombrero negro, cara extraña y con la soledad escrita en su rostro y pensó “esa mujer tiene una novela…”
Es tarea muy complicada idear un argumento para una historia, de forma que enganche al lector y que le obligue a quedarse pensativo durante un tiempo después de que otras obligaciones le hayan llevado a un momentáneo abandono de la lectura en la que estaba enfrascado. Yo lo he intentado varias veces sin éxito, claro. Es realmente complicado. Pero si, además, cogemos a los personajes y les dotamos de un trasfondo sicológico que pueda llegar a poner los pelos de punta al lector, entonces estamos hablando ya de un logro al alcance de muy pocos. Y todo por una extraña mujer con sombrero negro que desborda soledad por los cuatro costados.
La soledad y la pérdida…
Dos palabras muy duras. Dos conceptos que, en muchas ocasiones vienen unidos. Si alguien sufre de soledad y más aún, si ésta es provocada por una trágica pérdida tenemos los elementos necesarios y suficientes para entrar de lleno en una locura permanente, en un problema de identidad, en un shock emocional que te hace perder la cabeza, la noción de las cosas y la pérdida de la palabra. Esto último, para alguien que vive de escribir significa perder la única esperanza que tenía. Por eso su nombre es Ella, así, impersonal.
Ella, que todo lo tuvo…
Así es Ella, sin nombre, buscando la palabra perdida y la identidad de su vida. Siguiendo la pista de un suceso contado por su madre y que tiene mucho que ver con Florencia. Allí va ella, tras perder a su hija y su marido en un trágico accidente. Allí está Ella intentando restaurar los libros arrasados y anegados por las terribles inundaciones de la ciudad italiana en 1966. Unas veces Ella y otra La Donna di Lacrima… Pero bueno, eso os dejo que lo descubráis vosotros cuando leáis Ella, que todo lo tuvo, de Ángela Becerra, todo un tratado de psicología ante situaciones extremas. Un icono del idealismo.
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Fecha de publicación: 03/09/2010
432 páginas
Idioma: Español
ISBN: 978-84-08-09345-9
Presentación: Rústica sin solapas
Colección: Novela y Relatos