Cézanne, Site / Non-site.
El Museo Thyssen Bornemisza inaugura temporada con una exposición dedicada a Paul Cézanne, el “padre del arte moderno”.
Irritable, impetuoso, indeciso, brillante, temperamental… Paul Cézanne, el “ermitaño de Aix”, no comenzó con buen pie sus incursiones en el mundo de la pintura. Rechazado en la École des Beaux-Arts por la “tosquedad y rebeldía de sus trabajos, lejos de lo que normalmente se entiende por el arte” y en el Salón anual organizado por ésta, el pintor inicia sus estudios en la Académie Suisse lo que, unido a su carácter desconfiado, dificulta enormemente sus aspiraciones como artista.
Pero no está dispuesto a claudicar. Y es que Cézanne tenía su particular forma de entender la naturaleza y, claro está, de representar tan intensas emociones visuales y sensoriales. De ahí que sostenga con vehemencia sus posturas artísticas frente a los que le critican e incluso se burlan de sus obras. “Así es mi querido Mr. Stock, pinto porque veo, porque siento —tengo fuertes sensaciones—, también usted siente y ve como yo, pero no se atreve… Usted hace pintura de salón… Yo tengo, Mr. Stock, el valor de defender mis opiniones…”, se defiende ante la rigidez de monsieur Stock tras ser rechazado de nuevo en el Salon de 1870.
Pero es su gran amigo de Camille Pissaro quien, gracias a su temperamento apacible y tolerante, logra introducirle en el uso del color, la perspectiva aérea y las cortas pinceladas tan características del impresionismo. No obstante, la obsesión de Cézanne por reflejar toda la intensidad que brinda la naturaleza, por representar lo inalterable, le empuja a distanciarse de esta corriente volviendo de nuevo a las líneas abruptas, la ausencia de perspectiva, el rechazo del juego de luces y sombras… Y entonces, ¿cómo se las ingenia para lograr esa imponente profundidad tanto en paisajes como bodegones? Simplemente con el color y el empleo magistral de la superposición de formas.
El Museo Thyssen Bornemisza inaugura temporada precisamente con una muestra dedicada a Paul Cézanne —la primera monográfica organizada en los últimos treinta años en España—, una de las figuras fundamentales de la pintura de la segunda mitad del XIX, tanto que hoy se le considera como el “padre del arte moderno”.
La exposición, que cuenta con 58 pinturas del artista —49 óleos y 9 acuarelas—, se divide en cinco secciones y pretende ahondar en la relación del pintor con sus dos grandes pasiones: los paisajes y las naturalezas muertas, el interior y el exterior. De ahí el subtítulo de la misma, Site / Non-site; un concepto tomado del artista y teórico Robert Smithson, alusivo a esa dialéctica entre exterior e interior, entre la pintura al aire libre y el trabajo en el estudio.
+
Museo Thyssen-Bornemisza, del 4 de febrero al 18 de mayo de 2014
Horario: de martes a domingo, de 10.00 a 19.00 h. Sábados, de 10.00 a 21.00 h.
Último pase: una hora antes del cierre.
Venta anticipada de entradas en taquillas, en la web del Museo y en el 902 760 511.
Más información Museo Thyssen Bornemisza