En el Empordà y con los Pirineos de fondo. La vida secreta de Baco en el Hotel Peralada.

La historia que nunca nos contaron sobre Baco es que quedó enamorado de la Costa Brava. No hay rigor histórico que contraste esta afirmación, pero es que el espíritu del vino, su cultura y su disfrute viven en Hotel Peralada Wine Spa & Golf. Así­ que tal vez, la deidad tuvo una historia secreta. Y sino, debería haberla tenido.

En el centro de la llanura del Empordà y con los Pirineos de fondo, se alza este hotel muy cerca de la villa medieval de Peralada (Girona) donde el vino es excusa y causa. Un debate constante entre un hotel de lujo con una gastronomía de esas que se recuerda como anécdota de grandeza aún pasado los años, que también es un destino para el golf y el relax absoluto.

La entrada al Hotel Peralada engaña. Uno accede a un barrio privado con grandes casas a un lado y al otro del camino, hasta que desemboca en un green rodeado de un lago en el que se refleja este edifico. Una mezcla de colores fascinantes en el paisaje que ya nos anuncian que aquí­, nos espera algo espectacular.

Las 55 habitaciones del hotel se adueñan de las diferentes vistas al campo de golf, la Serra de l’Albera y el pueblo de Peralada con los Pirineos al fondo. Pero también tiene miles de rincones en los que relajarse, dar una caminata al atardecer o simplemente sentarse a leer con el sonido de la naturaleza de fondo.

A nivel gastronómico, aquí encontraremos 4 opciones diferentes para disfrutar durante nuestra estancia. La Masía Peralada se encarga de elaborar versiones aggionardas, creativas, sorprendentes de la tradición culinaria de la región.

El Bistro 19, es la emoción que completa los 18 hoyos del campo de golf. Terrazas privilegiadas al campo de juego y al Empordá, para saborear las delicias frescas y más ligeras y no interrumpir el partido.

El Wine Bar un espacio especialmente dedicado al disfrute de la bodega, muy próximo al club de cigarros y con salida al jardín para seguir la degustación, al aire libre, de lo mejor de cada cosecha.

Al mando de los fogones están el chef Xavier Sagristà y el jefe de sala Toni Gerez, que formaron parte de casi 10 años historia del taller creativo El Bulli donde ganaron dos Estrellas Michelín y del Hotel Restaurant Mas Pau donde recibieron su tercera Estrella Michelín. El desfile de sabores en la mesa es todo un espectáculo visual y gustativo.

El momento de relax absoluto llega en cuanto cruzas la puerta del Wine Spa.
Aquí, además de contar con todo tipo de servicios y espacios de bienestar, rinden un homenaje a su tradición vinícola, aprovechando todos los beneficios naturales de la uva para realizar tratamientos especiales con la línea propia de cosmética.

Pero un dios no se conformaría sólo con un espectacular espacio de descanso. La curiosidad le haría buscar más razones para elegir esta geografía y hacerla suya. Por eso, es posible que Baco también hubiera estado en el castillo, el casino o haya sido espectador de los festivales de Peralada, luego de hacer una visita a la bodega.

El conjunto monumental del Castillo de Peralada incluye un parque histórico, la biblioteca del convento, los museos del Vidrio y la Cerámica y alberga el Festival Castell de Peralada donde, cada verano, los grandes nombres de las artes suben al escenario del anfiteatro.

Baco no se equivocaba, porque desde el hotel también se pueden acceder a experiencias en la bodega de vinos y cavas Castell Perelada. Incluso, se puede desafiar al azar jugando en el Casino de Peralada. Además, el Hotel Peralada Wine Spa & Golf es parte de la red Costa Brava Hotels de Luxe.

Tal vez la deidad nunca estuviera por la Costa Brava. Pero cuando llegas allí, hay tanto para disfrutar, que la vida secreta de los demás, ya no importa.