Algo se cuece en Ibiza.

La nota de prensa que informa de la inminente apertura del Ushuaïa Ibiza Beach Hotel realiza una descripción tan alucinante del complejo que no vemos el momento de hacer una escapadita para verlo todo ya. Se trata de un establecimiento montado a prueba de lujo, de arquitectura típicamente ibicenca y blanco como la nieve. A su vera, la Playa d’En Bossa, con sus aguas cristalinas, y a cinco kilómetros, el centro. Pero sobran una y otro porque el hotel ofrece tanto de todo que no dejará tiempo para nada más. Maravillosa su piscina de agua dulce con sus camas balinesas y fantástico el río que recorre la vegetación de los jardines. Las habitaciones Swim-up cuentan con un acceso directo de la terraza al río.

La cabina del DJ se encuentra en la piscina central y contará con la visita de los músicos del momento (las fiestas prometen ser apoteósicas y recuperar los mejores momentos del esplendor de los 70). Además, disponen de un estudio para que quien lo desee haga sus pinitos grabando una maqueta.

El tema gastronómico está muy bien resuelto: una restaurante mediterráneo, una barra japonesa y el Magig & Chill Garden para el picoteo de media mañana. Existen cinco clases de habitaciones, todas provistas de lo último en tecnología como los leds de cromoterapia para que te pongas el ambiente a juego con tu humor. Nos fascinan las cortinas blackout que logran una oscuridad total a cualquier hora del día y los tocadores con espejo tipo camerino.

Y por si fuera poco, el Ushuaïa cuenta con el Wellness Beauty Center, un completo instituto con tratamientos de barros, aromaterapia y una selecta carta de masajes; también una peluquería que parece recién traída del futuro. Si lo necesitas, hay un maquillador siempre disponible. El servicio VIP 24 horas es lo de menos, pero también lo ofrecen.