El armario de Dolores.
Una vez más, el aire veraniego inunda los tejidos y patrones de la firma Dolores Promesas.
¿En qué piensa Dolores Promesas cuándo piensa en la primavera? En su infancia, en sus horas de patio jugando al sol, en las tardes que alargan el día y sobre todo, en la luz, la luz del sur. Por ello, los estampados, los tonos alegres y un imprescindible toque denim inundan de color su armario de primavera.
Dolores Promesas estrena temporada retando a la creatividad con diseños llamativos y exclusivos estampados con motivos personalizados, florales, animales, geométricos… que se convierten, junto a los vestidos, en los grandes protagonistas de una colección en la no faltan blusas holgadas, faldas con vuelo, minis o shorts y todo ello adornado de accesorios y complementos de colores estridentes.
En cuanto a los tejidos, la diseñadora apuesta por las telas vaporosas y frescas –algodón, lino o seda en tonos como el rojo, el fucsia, marinos y turquesas, tostados degradados, el clásico e incombustible blanco/negro y el eterno “vaquero” que combina con todo aportando adecuado toque casual a los momentos más informales– para dar vida a una colección en la que hay espacio para cualquier estilo: marinero, romántico, bohemio o chic.
Todo tiene cabida en el «armario de Dolores», aunque de ninguna manera pueden faltar sus célebres camisetas con mensaje (“No soy tu princesa”, “Sin pena, penita, pena”…), convertidas ya en un icono de la firma.
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