¿Nos miramos?

Esto es precisamente lo que persigue Carolina con su última colección Resort. Una lluvia de miradas sobre una colección atemporal, como viene insistiendo en sus últimas creaciones, pero con ese punto de protagonismo que otorga el estampado, gran protagonista de esta propuesta.

Una mezcla psicodélica a base de flores, como punto de partida, y líneas geométricas en rojos, rosas, azules y violetas que podrían ser la única pista de que nos estamos enfrentando al verano. Looks infinitamente femeninos como viene siendo costumbre, con una mirada a los 70’s a partir de pantalones palazzo y vestidos de fiesta que resaltan la figura femenina con cinturas marcadas.

Sarga de seda, crepé, organza… Materiales de primera calidad para una mujer que disfruta sin tiempos de la sensualidad y la elegancia. Una mujer decidida y arrebatadoramente glamurosa. Una mujer que persigue miradas.