Mustang. La sorpresa francesa de los Oscars y los Goya
No hay ley que pueda encerrar esos años de nuestra vida.
Al norte de Turquía, cinco hermanas de los 12 a los 16 años disfrutan como cualquiera de su edad de un verano a la orilla del mar, conociendo los primeros juegos con los chicos del colegio. Pero algo tan aparentemente normal e inocente no lo es tanto en una sociedad tan influenciada por las normas de la religión islámica, con la que se dará de frente la alegría y los juegos de las niñas. La familia decide que con ellas se deberá hacer lo que la tradición exige: prepararlas para el matrimonio.
Queramos o no, seamos conscientes de ello o simplemente ocurra, la juventud, la infancia, la adolescencia siempre se convierten en elementos disruptores de cualquier ambiente. No hay nada establecido en ellas, salvo lo que se pretende, lo que pretendemos establecer desde fuera, desde eso que hemos dado en llamar madurez. Eso es aún más significativo y rompedor en ambientes tan aparentemente cerrados como la comunidad del norte de Turquía donde la directora Deniz Gamze Ergüven sitúa la acción de su película Mustang. Y de esa sencilla pero poderosa (y cotidiana) contienda nace toda la grandeza de una película que dice mucho más de lo que parece. Así consigue ser lo mismo que sus protagonistas, un elemento rompedor de lo paralizante y negativo de la comunidad turca a base de frescura, sencillez y sonrisas. Y así ha logrado conquistar el Goya a la mejor películas europea y ser una agradable sorpresa entre las nominadas a los Oscars, aunque finalmente la estatuilla dorada fuera para El Hijo de Sául.
Merece la pena echarse una vuelta por esta Mustang. Se siente uno joven. Y eso es algo que nunca está de más.
Título original: Mustang
Año: 2015
Duración: 97 min.
País: Francia
Director: Deniz Gamze Ergüven
Guión: Deniz Gamze Ergüven, Alice Winocour
Música: Warren Ellis
Fotografía: David Chizallet, Ersin Gok
Reparto: Erol Afsin, Ilayda Akdogan, Doga Zeynep Doguslu, Elit Iscan, Ayberk Pekcan, Günes Sensoy, Tugba Sunguroglu