La semana de los Goya: Las actrices.
Las dos nominaciones de Emma Suárez la hacen destacar en la lucha de la docena de posibles ganadoras de los tres premios Goya de interpretación femenina.
Al contrario que la docena de actores nominados para la próxima entrega de los Goya, las actrices no encuentran sus interpretaciones ubicadas en las películas favoritas para considerarse triunfadoras de la gala, salvo Ruth García, nominada como mejor actriz revelación por Tarde para la ira, que además suma una quinta mención en la categoría de interpretaciones a las cuatro que presenta en el apartado masculino. Desde luego, se nota que Raúl Arévalo ha tirado en su exitoso debut como director de su experiencia como actor para motivar a los suyos, que han salido de la experiencia arrasando. Y si la película de Arévalo destaca por sus interpretaciones masculinas, La puerta abierta, con dos de sus actrices nominadas, Machi y Pávez, lo hace en el apartado femenino.
Pero si hay una actriz que puede arrasar en esta 31ª gala de los Premios Goya es Emma Suárez, que opta a dos premios de la Academia de una tacada: el de mejor actriz principal por Julieta, de Pedro Almodóvar, y el correspondiente a mejor actriz de reparto por su presencia en La próxima piel, de Isaki Lacuesta e Isa Campo. Sin duda alguna, una buena oportunidad para que la actriz sume su segundo Goya. Claro que para conseguirlo tendrá que luchar con pesos pesados como Candela Peña, la ya mencionada Terele Pávez o la misma Sigourney Weaver, por no hablar de la ganadora de un Oscar Penélope Cruz.
Lo cierto es que la lucha para hacerse con las tres estatuillas reservadas para las interpretaciones femeninas se prevee intensa y dura. Y nosotros que nos alegramos preparándonos para disfrutar de lo mejor de las actrices españolas que, visto el nivel, es decir mucho.
Emma Suárez, por Julieta, mejor actriz principal.
Dos décadas han pasado ya desde que Emma Suárez ganase su primer Goya en lo que era su segunda nominación, por El perro del hortelano como mejor actriz protagonista. Quizás por el tiempo que ha pasado, de una tacada puede elevar el número a tres. ¿Será su noche?
Candela Peña. por Kiki, el amor se hace, mejor actriz de reparto.
Candela Peña puede conseguir ni más ni menos que su cuarto Goya por su participación en la película de Paco León, todo un récord para la actriz catalana, que alcanza la sexta nominación. No lleva mal promedio….
Anna Castillo, por El olivo, mejor actriz revelación.
La televisiva Anna Castillo ha visto premiada su participación protagonista en la producción de Icíar Bollaín acompañando a su otro protagonista, el también nominado Javier Gutiérrez. Una pareja que puede salir triunfante en la próxima gala.
Carmen Machi, por La Puerta abierta, mejor actriz principal.
Las dos nominaciones conseguidas por La puerta abierta corresponden a sus dos protagonistas femeninas, las veteranas Carmen Machi y Terele Pávez, para las que sería su segundo Goya. En el caso de Machi, tras el conseguido por 8 apellidos vascos en la que fue su primera nominación.
Terele Pávez, por La puerta abierta, mejor actriz de reparto.
Sexta nominación para Terele Pávez, todas ellas como actriz de reparto, la primera de ellas allá por 1988 en Laura, del cielo llega la noche. Puede conseguir la segunda estatuilla tras la obtenida con Las brujas de Zugarramurdi.
Silvia Pérez Cruz, por Cerca de tu casa, mejor actriz revelación.
Emma Suárez no es la única actriz que puede subir por partida doble al escenario de los Goya para recoger un premio. También puede hacerlo Silvia Pérez Cruz, aunque uno de ellos sea por la mejor canción original. Pero un Goya es un Goya, ¿no?
Penélope Cruz, por La reina de España, mejor actriz principal.
Tan sólo la presencia de Penélope Cruz consigue para la película de Trueba un sitio en las principales categorías de los Goya. La aparente debacle de la película, sin embargo, supone para la madrileña colocarse a la altura de Victoria Abril como actriz con mayor número de nominaciones a los Goya como protagonista, y la posibilidad de alcanzar a Carmen Maura como la que más veces ha conseguido alzarse con un Goya en esa categoría, tres.
Sigourney Weaver, por Un monstruo viene a verme, mejor actriz de reparto.
Está claro que las interpretaciones no son el fuerte de la película de Bayona, con la más que digna excepción de la veterana actriz norteamericana, que por otra parte cubrirá el cupo de las habituales presencias de estrellas internacionales en la gala. Si es que viene, claro.
Ruth Díaz, por Tarde para la ira, mejor actriz revelación.
Mantener el tipo y además conseguir una nominación en una película donde cuatro de tus compañeros de rodaje masculinos consiguen lo mismo, habla muy a las claras del excepcional trabajo de Ruth Díaz en la película de Raúl Arévalo. Gracias a una tarde para la ira, puede ser para ella una noche para la alegría.
Bárbara Lennie, por María (y los demás), mejor actriz principal.
Posibilidad de conseguir el segundo Goya de cuatro nominaciones para Bárbara Lennie, tras el obtenido hace dos años por Magical Girl. De momento, ya se hecho con el Premio Feroz. Y el que avisa, no es traidor…
Emma Suárez, por La próxima piel, mejor actriz de reparto.
El Festiva de Málaga y los Premios Gaudí son los dos campos de batalla donde Emma Suárez ha obtenido el triunfo con su interpretación en La próxima piel, primero de los pasos de lo que podría ser un doblete histórico en los Goya, algo que sólo ha conseguido Verónica Forqué en la edición de 1987.
Belén Cuesta, por Kiki, el amor se hace, mejor actriz revelación.
Belén Cuesta acudirá a la Gala de los Goya con un Premio Feroz bajo el brazo, aunque no será por su papel en la comedia coral de Paco León, si no en la serie televisiva Paquita Salas. Más conocida por sus participaciones televisivas, el Goya le puede abrir las puertas del cine.