Jauja.

Jauja narra la historia de Gunnar Dinesen (Viggo Mortensen) un general danés que es contratado por el ejército argentino cuando el gobierno decide anexionar al país las tierras de la Patagonia a finales del siglo XIX. Se trata de una misión por tierras desérticas en medio de muy duras condiciones. En un momento del viaje, la hija de Gunnar, que le acompañaba en la travesía, se escapa, y el general se ve abocado a una busqueda desesperada por encontrarla.

Premiada por la crítica internacional (Fipresci) en el pasado festival de Cannes, Jauja es una película indudablemente distinta. Característica que desde luego era de esperar siendo su director el autor de la anterior Liverpool, Lisandro Alonso, quien en esta ocasión si ha querido contar con guionista (Fabian Casas) y con al menos un actor profesional, Viggo Mortensen, para contarnos esta historia de horizontes perdidos y llanuras desérticas más perdidas todavía, con cierto aire de película del Oeste sin llegar a serlo. Alonso vuelve a ofrecernos la belleza de sus planos largos, de su cine reflexivo y pausado, para hablar de la relación entre lo construido y lo soñado, entre el hombre y sus búsquedas, entre la llamada civilización y el resto del mundo al que tan cómodo resulta llamar barbarie.

Así que no es recomendable ir al encuentro de Jauja pensando en una película como las demás, sino más bien en un ejercicio de estilo que además, cuenta una historia. Y a veces es más que aconsejable perderse en horizontes y en desiertos, que os lo digo yo.