El Consejero.
Cuidado si vas al cine atraído por el brillo de los nombres de esta película...
No se si es una buena idea acudir al cine a ver El Consejero atraído por el brillo de sus nombres, que lo tiene, y en cantidad: Ridley Scott a los mandos, guión de Cormac McCarthy (Novelista autor de La Carretera o No es país para viejos), y Michael Fassbender, Brad Pitt, Javier Bardem, Cameron Diaz, Penélope Cruz o Goran Visnjic como protagonistas. Y no lo sé porque todos esos apellidos pueden dar la impresión de que se trata del típico producto comercial y fácil, a mayor gloria de taquilla y fans. Y puede que si vas al cine esperando eso, no lo encuentres, a pesar de que son esos nombres y apellidos los usados en la promoción de la película.
Y es que El Consejero no es una película fácil. Y puede que no sea ni comercial siquiera. A partir de un argumento que puede parecer sencillo -y hasta manido-, Scott y McCarthy se montan una reflexión sobre un montón de cosas -puede que demasiadas- que hacen que la visión de la película necesite de una atención especial, quizás hasta varias revisiones. En realidad, El Consejero tiene pinta de esas películas que se hacen de culto para unos y que para otros son bodrios infumables. El argumento que he calificado como sencillo: Un abogado (Fassbender) y su novia (Cameron Díaz) se introducen en el mercado de la droga impulsados por la simple y siempre clásica y efectiva avaricia.
Dicho todo esto, perderse una película de Ridley Scott es de lo que no se puede permitir uno. ¿Se nota que soy fan? Así que os veo sacando las entradas…