Nicholas Nixon: entre lo visible y lo invisible.
Fundación Mapfre presenta en Madrid la mayor retrospectiva del fotógrafo norteamericano Nicholas Nixon, uno de los más importantes de la segunda mitad del siglo XX.
Para Nicholas Nixon todo empezó con una Leica entre las manos y la vista elevada sobre los horizontes de Boston y Manhattan, y las soledades de Nuevo México. Corrían los años 70, Nixon aún estudiaba y los paisajes urbanos eran su principal referente. Miraba de lejos, escudriñaba el asfalto, las fronteras entre la ciudad y el desierto, el orden y el caos. Espacios deshabitados más próximos a los escenarios fantasmas de Edward Hopper que a los tumultos humanos de las grandes urbes.
En aquel tiempo de miradas inciertas, lo humano no cabía en su objetivo. Claro que, ello no le impedía profundizar tras las ventanas o en las perspectivas oblicuas de las calles. Todo cambió a partir del 77, cuando empieza a explorar las posibilidades narrativas de los grandes formatos. Cámaras de 4 x 5, 8 x 10 e incluso de 11 x 14 pulgadas modifican por completo su forma de trabajo. Sus objetivos, perspectivas y composiciones giran hacia el intimismo, la austeridad y la nitidez visual. El retrato, las personas se convierten, entonces, en el centro de su obra e inquietudes. En la utopía de taladrar el alma de sus modelos.
Casi un sueño para la mayoría, no para Nixon quien ya desde el principio mostraba con claridad y definición aspectos inadvertidos de la realidad y una técnica extraordinaria. De esta época proceden las imágenes más confortables: niños jugando, escenas cotidianas cubiertas de sosiego, rostros serenos cada vez más cercanos. Poco a poco se embarca en un camino en absoluto difuso donde las miradas del artista y los modelos confluyen de manera irremediable, revelando la tensión entre lo visible (el contenido) y lo invisible (los pensamientos e inquietudes de los protagonistas).
La Fundación Mapfre exhibe la mayor retrospectiva hasta la fecha dedicada a la obra de Nicholas Nixon, con más de doscientas fotografías tomadas entre 1974 y 2017. Comisariada por Carlos Gollonet, hallamos en ella un hilo conductor claro, un mundo propio ilimitado y una extraordinaria capacidad para reinventarse. Desde el estaticismo urbano de sus inicios, hasta la conocidísima serie de Las hermanas Brown, una de las reflexiones más certeras sobre el paso del tiempo en la historia de la fotografía que se extiende a lo largo de toda su carrera.
El recorrido de la exposición comienza con Vistas —serie en la que se incluyen imágenes tomadas en los alrededores de la ciudad de Alburquerque mientras estudiaba fotografía— y las instantáneas urbanas de Boston y Nueva York. Porches, la serie más extensa y fructífera de Nicholas Nixon, marca el punto de inflexión en su trayectoria que, a partir de ese momento, busca (y encuentra) el enfoque íntimo.
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Nicholas Nixon. Retrospectiva. Del 14 de septiembre de 2017 al 7 de enero de 2018. Fundación MAPFRE. Sala Bárbara de Braganza (C/ Bárbara de Braganza, 13). Comisario: Carlos Gollonet. Conservador de fotografía Fundación MAPFRE.