Wake Up. Coves. Vídeo, letra e información.
En su primer Lp, el dúo inglés plasma la cruda disección de una relación rota.
No parece una banda nueva que apenas lleva poco más de dos años de vida. Originarios de Royal Leamington Spa (o simplemente Leamington), una localidad en el corazón de Inglaterra formada alrededor de sus aguas medicinales, el dúo integrado por John Ridgard y Rebeca “Beck” Wood es una de las propuestas musicales más interesantes y con mejor proyección que ha salido del Reino Unido en los últimos meses.
Esta fórmula del dúo parece que sigue dando buenos resultados. Es posible que tenga su origen en la crisis que afecta al negocio de la música y que sólo los pequeños, los de gastos más reducidos, tienen la opción de salir adelante. También puede ser simple practicidad. El caso es que John y Beck se lo guisan y se lo comen ellos solos. Escriben sus canciones, música y letra, las producen y las tocan. Para sus actuaciones en directo suelen llevar al menos a una tercera persona, que ya es casi fija.
Después de publicar una serie de singles y Ep´s, llega su primer álbum “Soft Friday”, en el que se incluyen regrabaciones de algunos de esos sencillos y temas nuevos. En él encontramos un atmosférico paisaje sonoro, misterioso y atractivo, con voces lánguidas y sensuales, guitarras con mucha rever y algo de angustia, ecos narcotizantes, recuerdos de las bandas femeninas de los años 60 e hipnóticos ritmos de batería. En la senda de Jesus And Mary Chain, de The Raveonettes y similares.
Canciones intensas pero asequibles, de corte indie rock, con historias de gran carga emocional. La banda ha descrito el álbum como “la anatomía de una relación condenada” y en sus letras plasman la dolorosa descomposición que sufrió la anterior relación de Beck y sus distintas etapas: enamoramiento, deseo, rechazo, dolor, enemistad, resentimiento y, finalmente, el fin. El vacío, la nada. Todo contado con honestidad y crudeza, desgarro y belleza, angustia, pasión y obligada distancia.
“Wake Up” es el tema que cierra el álbum, es el videoclip de apoyo y es una excelente e potente canción a la que le encajan múltiples etiquetas, desde garaje a rock, de indie pop a psicodelia, de gótica a synth pop. De la oscuridad a la luz.