John Wayne no fue John Wayne desde que nació sino desde que nació como actor; antes de eso fue un niño llamado Marion; nació en Iowa el 26 de mayo de 1907 y, todavía niño, se trasladó con su familia al desierto de Mojave buscando un clima cálido que beneficiase a los maltrechos pulmones de su padre; fue allí y entonces cuando el pequeño Marion aprende a montar a caballo; más adelante se trasladarían a Glendole, cerca de Los Ángeles; allí su padre trabaja en una farmacia y él, que tenía 11 años, iba a la escuela, repartía periódicos, también las recetas magistrales de su padre… y comenzaba a aficionarse al cine.
En la Universidad de Southern California destacó como deportista pero lo dejó pronto porque la pasión por el cine se había hecho fuerte en él desde la adolescencia, su primer trabajo fue en la Fozz como atrezzista. Hace ya entonces pequeños papeles y aparece por primera vez en los créditos como ‘Duke’ Morrison (El Duque fue su apodo), era por entonces un galán de cine con brillantina en el pelo, corrían los años 30… Ya en los 40 -con el estreno de ‘La Diligencia’ de John Ford en 1939- comenzaría la que es una de las carreras más deslumbrantes de la historia del cine, la de John Wayne, un nombre al que, confesó, no haberse acostumbrado nunca del todo.
Se casó tres veces y tuvo 7 hijos, 4 de su primer matrimonio y 3 del segundo; rodó más de 150 películas, 20 de ellas con John Ford como director y se convirtió en uno de los rostros más populares y admirados de Hollywood.
Con lo que no pudo el bueno de Wayne fue con el cáncer. Murió a los 72 años aquejado por esta enfermedad y descansa tras una lápida cuyo epitafio aparece grabado en perfecto castellano: Feo, fuerte y formal.
El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.
Abogado, doctorado en ciencias políticas y presidente número 28 de Estados Unidos, Woodrow Wilson nació en Staunton, Virginia, el 28 de diciembre de 1856. + ver