Jean Baudrillard, filósofo y sociólogo francés descreído que opina que vivimos en un mundo virtual que sólo existe en la pantalla de televisión, nació en Reims en el seno de una familia modesta. Estudió filología germánica en La Sorbona de París y ejerció como profesor de alemán en un instituto de enseñanza media. Leyó su tesis doctoral bajo la dirección de Henry Lefebvre e inició su actividad docente en la Universidad de Nanterre, donde tuvo un papel activo en los sucesos de mayo del 68. Ese mismo año publica su primera gran obra original, llamado como su tesis El sistema de los objetos, en el que analiza la relación del hombre con los objetos en la sociedad de consumo.
Traductor al francés de Bertolt Brecht y Peter Weiss entre otros, Baudrillard fue director científico del IRIS -Recherche sur l’Innovation Sociale- de la Universidad París-IX Daphine y profesor de filosofía de la cultura y de los medios en los seminarios intensivos de verano en la European Graduate School de Saas-Fee, Suiza. Con el tiempo, Baudrillard se convirtió en uno de los pensadores más representativos de la posmodernidad, aunque su pensamiento sea difícil de encasillar en corrientes concretas. Quizás por su fama de chovinista provocateur, Baudrillard no llegó a ganarse la clara respetabilidad académica de compañeros como Lacan, Deleuze, Derrida o Foucault. Su tesis más conocida es que en el mundo posmoderno no es que haya veladuras sobre la realidad como pensaron Marx, Nietzsche y Freud, sino que no hay realidad, sólo un simulacro de la realidad, una suerte de realidad virtual creada por los medios de comunicación.
Así, Baudrillard se ha convertido en una de las cabezas pensantes sobre el mundo de la tecnología, de las redes informáticas, del poder de los medios de comunicación y de la realidad virtual. Toda su obra ha estado consagrada al análisis de la sociedad contemporánea, caracterizada por un proceso de desmaterialización de la realidad: la mirada del hombre ya no se dirige hacia la naturaleza, sino hacia las pantallas de televisión; la comunicación se ha convertido en un fin en sí misma y en un valor absoluto.
“La necesidad de hablar, incluso si uno no tiene nada que decir, se vuelve más acuciante cuando uno no tiene nada que decir, así como la voluntad de vivir se hace más urgente cuando la vida ha perdido su significado.”
“El principio de mundialización de la información va en contra del principio universal de la solidaridad. Ello es así porque la información se agota en sí misma y ella misma es su fin.”
El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.
Abogado, doctorado en ciencias políticas y presidente número 28 de Estados Unidos, Woodrow Wilson nació en Staunton, Virginia, el 28 de diciembre de 1856. + ver