La vida de Poe parece un cuento salido de su pluma, un relato terrible por lo que tiene de real, de haber sido vivido por un niño: sus padres -actores ambos- fallecieron cuando Edgar contaba apenas 2 años, fue adoptado por un matrimonio con el que su suerte no fue tan feliz como cabría esperar, su madre adoptiva también murió pronto y la relación de Poe con su padre adoptivo nunca fue buena.
Vivió en Inglaterra y fue allí donde comenzó su educación, regresó a Estados Unidos donde terminó su educación en centros privados, comenzó también sus estudios universitarios en Virginia pero no llegó a terminarlos; por aquel entonces su relación con el alcohol y el juego era ya intensa y acabó siendo expulsado de la universidad.
Ingresó en el ejército pero, a pesar de las importantes influencias de su padre, no duró en él más que dos años aunque, cuando fue expulsado, ya había publicado sus primeras obras.
Ya en los años 30 su vida pareció comenzar a discurrir por sendas más placenteras, se casó con su prima y comenzó a trabajar en el Southern Baltimore Messenger, un periódico en el que no sólo publicó algunos de sus textos y poemas sino que llegó a dirigirlo con notables resultados. Colaboró también en varias revistas y, ya en los 40, comenzó a cosechar importantes éxitos como crítico literario y también como cuentista; y es que a Poe no sólo le debemos la magia de sus relatos de terror sino la puesta en valor del cuento, de los relatos breves, en la grandeza que tienen y por la que se los reconoce hoy, hasta entonces eran considerados un género menor.
En 1847 su esposa fallece después de pasar largo tiempo enferma y Poe se deja llevar por su alcoholismo y sus coqueteos con las drogas, dos años más tarde fallecía también él arrastrado por sus adicciones.
Poe fue un gran teórico de la literatura y, aunque su obra está inevitablemente salpicada por el romanticismo, el autor americano renegó de esta corriente literaria, pues no creía en la inspiración ni en la creatividad como un juego de azar sino en las técnicas literarias y en el trabajo meticuloso; Poe amaba la poesía y la practicó con gran empeño pero sus poemas, con mayor calidad de la que se les reconoció en su día, palidecían ante su maestría a la hora de contar relatos breves; fue el precursor del cuento, el que convirtió la novela corta en un género en sí mismo y el que abrió la senda a los relatos policíacos e incluso a los de ciencia-ficción porque aunque tendamos a recordarlos como el maestro de los cuentos de terror, fue en realidad un escritor completo y magnífico, uno de los grandes de la literatura universal y un nombre inolvidable de la literatura norteamericana.
El mundo está lleno de gente interesante, de gente que aporta, que crea, que sabe… la gente que construye en sociedad, la gente que admiramos, en la que creemos, es ésta.
Abogado, doctorado en ciencias políticas y presidente número 28 de Estados Unidos, Woodrow Wilson nació en Staunton, Virginia, el 28 de diciembre de 1856. + ver