Un Jardín en Recoletos.

Un entorno privilegiado donde disfrutar del auténtico sabor mediterráneo en pleno centro de Madrid.

Hay algo que los que vivimos en Madrid capital no disfrutamos como nos gustaría, a no ser que nuestro poder adquisitivo nos permita tener un chalet con jardín en barrios céntricos de la ciudad. Prohibitivo, lo sabemos. Pero imaginaos cómo sería comer o cenar cada día en un hermoso jardín en pleno centro de Madrid. ¿Un lujo al alcance de muy pocos? Pues no.

Los turistas, cuando llegan a Madrid seguro que no echan de menos playas o zonas verdes. Vienen a Madrid y el concepto es otro, pero tras largos paseos por el asfalto de la ciudad y cientos de cosas interesantes que visitar quizás sientan que les falta algo. Madrid es una ciudad con un hipnotizador encanto, con miles de recovecos que dejan con la boca abierta y con una oferta cultural, de ocio, deportiva…, que pocas ciudades en Europa pueden ofrecer. Y si quieres zonas verdes, pues también. La Casa de Campo, el Parque Juan Carlos I, el Parque de El Capricho,… El Retiro.  Sólo falta disfrutar de una deliciosa comida en el jardín y coronar la jornada con un Gintonic de los de verdad o simplemente con una cerveza. ¿Un lujo al alcance de pocos? Pues no.

Seas madrileño o de cualquier otro lugar, acabarás paseando por El Retiro y soñarás con ese gran homenaje gastronómico en un entorno verde, pero sin tener que desplazarte. Y sí, ¡sorpresa! Porque en Madrid todo es posible. Al salir del parque, con solo cruzar la Calle de Alcalá podrás comer o cenar rodeado de palmeras, geranios, margaritas y madroños; un auténtico oasis urbano pegadito a la calle Serrano, en plena Milla de Oro.  Y es posible porque existe un Hotel con jardín, allí mismo, sorprendente, un paraiso verde en plena ciudad.

Se trata del Hotel VP Jardín de Recoletos; un entorno privilegiado donde degustar un excelente menú mediterráneo, un Gintonic con tu ginebra premium favorita o una deliciosa cerveza fría y ¡al alcance de cualquier bolsillo! Probad una vez. Seguro que repetiréis. Y encima podréis presumir de haber disfrutado de una romántica cena a la luz de las velas – o de la luna – en vuestro jardín de la calle Serrano. No tengáis prisa en revelar lo que os ha costado. Dejad que la gente os mire un poco raro, que os tengan un poquito de envidia. Después, cuando confeséis el precio, todos correrán a imitaros. Seguro.

VP Jardín de Recoletos

Calle Gil de Santivañes, 6. 28001 Madrid



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