Los Cien Balcones, 100 sensaciones.

Con una cocina de vanguardia ideal para disfrutar de la mejor gastronomía moderna y a la vez tradicional, donde la calidad, el buen precio y el estupendo servicio renovado recientemente bajo la dirección experta de Carlos Alberto, unido a la originalidad y variedad de sus platos, hará las delicias de los paladares más exigentes.

Estos sólo son unos de los pequeños detalles que deben destacarse de un establecimento entrañable y agradable situado entre el Templo de Debod y el Palacio Real de Madrid. El resto de atractivos proviene de los fogones de la casa…

Abriendo sus puertas desde primeras horas de la mañana para desayunar, con un exquisito café y todo tipo de repostería, tostas variadas y pinchos caseros que abren el apetito ya al contemplarlos.

La carta contiene muchas más sensaciones culinarias que los platos típicos insdispensables en un restaurante. No faltan los embutidos ibéricos ni las ensaladas como entrantes fríos y calientes, las suculentas carnes, como el Solomillo de cebón con verduras salteadas con foie, el Rabo de toro estofado al vino tinto con verduras de temporada, un Entrecot de Buey al gusto, el Magret de pato a la naranja o el Carré de cordero asado.

Entre los pescados es la Merluza en salsa de marisco con frutti di mare, el Bacalao confitado con salsa de piquillos y laTagliatelle de sepia con su tinta alguno de los platos recomendados; pudiendo optar también por el variado menú diario a un precio de 10,90 € o los exquisitos arroces y paellas por encargo.

Tampoco tenemos que olvidar sus deliciosos y dulces postres con los que pondrán el toque final a las comidas y las cenas, como la Tarta de queso con helado de frutos rojos o el Brownie con dulce de leche Argentino.

Por las tardes, Los Cien Balcones se convierte en un espacio ideal para la conversación entre amigos o en pareja acompañados de fondo con una relajante y excelente Chill Out Session.

Y por la noche, no podría faltar el acompañamiento perfecto del Gin Tonic de la mano de profesionales que  con la luz y el ambiente del local  hacen del crepúsculo algo inolvidable en una compañía agradable.