El nuevo Coque está en boca de todos… y en Madrid.

Los hermanos Sandoval son hijos de una herencia gastronómica que va ya por la tercera generación, tres generaciones regentando una casa de comidas en Humanes, en el sur de Madrid, que se ha renovado tanto y tan profundamente que ha cambiado incluso de ubicación.

El Coque, un establecimiento que pasó de ser una casa de comidas a ser un restaurante de vanguardia con reconocimiento en la Guía Michelin incluido, acaba de abrir sus puertas en el corazón de Madrid, un traslado que venía pareciendo inevitable desde hacía ya mucho tiempo porque, dado que hablamos de un restaurante con vocación de ser referente en el panorama de la cocina creativa, su instalación en el corazón de la capital era casi una obligación para atraer todavía a más comensales de los que se desplazaban a Coque original.

El lugar elegido por los hermanos Sandoval para lanzarse a la conquista gastronómica de la capital es un espacio de más de 1000 metros cuadrados en el número 11 de la calle Marqués de Riscal.

Mario, Rafael y Diego Sandoval eligieron a Jean Porsche para ocuparse del diseño de un establecimiento que es, probablemente, la apertura (re-apertura en su caso) más interesante de Madrid, no en vano hablamos de un restaurante con dos Estrellas Michelin y tres Soles Repsol.

El nuevo Coque se distribuye en cuatro espacios: cocina, sala, bodega y bar; en cada uno de estos espacios los hermanos Sandoval hilan una propuesta gastronómica y enológica que te conquistará sin remedio.

Esa propuesta gastronómica se presenta en un doble menú: Q y Q+; el menú Q es la versión corta de un menú degustación que te permitirá descubrir la cocina de los hermanos Sandoval mientras el menú Q+ es un puro deleite para los sentidos.

Si quieres descubrir los sabores de una carta con dos Estrellas Michelin, no lo dudes, haz tu reserva en el restaurante Coque y disfruta de una incomparable propuesta gastronómica que comienza en el bar del restaurante, pasa después por la bodega e incluso por la cocina antes de acabar por todo lo alto en una de las mesas de la sala.