Alta cocina malagueña con sabor a verano.
José Carlos García propone en Málaga el sabor de la mejor cocina.
Hay restaurantes que escenifican de un modo casi perfecto el hecho sobradamente conocido que afirma que a comer se empieza con los ojos. Por eso algunos locales son versátiles y bellos, acogedores, elegantes, sugerentes y muy sorprendentes; por eso se integran en el entorno en el que viven, para poder decir sin temor a equivocarse que comiendo en sus salas te comerás un pedazo del mundo que habitas.
Un lugar así es el restaurante de José Carlos García, un excepcional cocinero malagueño en cuyas salas descubrirás los sabores de la costa del sol; la suya es una cocina abierta al mundo, creativa y de autor con sólidas raíces en su Málaga natal.
Una visita a Málaga tiene que llevar reserva previa para cenar en el restaurante de José Carlos García, por su modo de entender la cocina, por su encantadora terraza de cañizo en el puerto de la ciudad, por la delicadeza de sus platos, por su creatividad… porque la suya es una cocina reconocida en el mundo gastronómico con una Estrella Michelín… porque, sin duda, sus propuestas y tu buen gusto así lo merecen.
Su pasión por la cocina viene de antiguo, comenzó a amarla de manos de quien dedica a ella el mayor cariño, sus padres, y, además de por la escuela de gastronomía, su talento natural para crear recetas y sabores fue alimentado por cocineros de la talla de Joan Roca y Martín Berasategui.
Ahora es él quien ejerce de maestro al tiempo que continua aprendiendo y creando entre fogones, en una cocina que se deja ver y mirar, que incita de hecho a ser observada al estar ubicada en un cubo transparente en pleno puerto de Málaga; y aunque el restaurante deslumbra por la elegancia y versatilidad de sus espacios, por sus múltiples posibilidades para dar cabida a eventos de todo tipo, nosotros nos quedamos en su terraza acristalada con los mástiles al fondo y el cañizo como elemento cálido y discreto que aleja las miradas indiscretas de los comensales a los que sirve cada día José Carlos García.
Conocíamos ya su restaurante pero, en verano, nos llama y nos gusta más si cabe porque la Costa del Sol deslumbra, sus sabores seducen y nadie como José Carlos García sabe llevarlos al plato.