Platos compuestos.

Luzi Bombón ha llegado a la ciudad. En concreto ha llegado al Paseo de la Castellana de la capital española y lo hace con una original carta en la que cada comensal podrá componerse su plato favorito eligiendo un plato principal el cual puede acompañar con las guarniciones (que aquí llaman ‘sides’) que prefiera; así, podemos elegir para acompañar las carnes o los pescados que se hacen a la brasa, una lasaña de ceps o un shitake, si nos apetece probar algo original, o con los más clásicas patatas fritas o los infalibles pimientos de piquillo.

Además, la divertida carta esconde un apartado ‘Mientras tanto’ en el que encontrar deliciosos aperitivos para aplacar el gusanillo mientras se esperan los platos principales entre los que se encuentran la burrata con rúcula o el ceviche de bogavante con leche de tigre.

Todo ello en un local que a través de un evidente guiño a los años 50 del pasado siglo se organiza en dos niveles con diferentes ambientes, uno más tradicional y formal y otro con mesas bajas y pequeños sofas y biombos que aportan mayor calidez a un ambiente presidido por una chimenea.

Y para acabar de redondear un espacio que hace de su cocina ‘non stop’ (trabajan ininterrumpidamente de 12 de la mañana a 2’30 de la madrugada) su bandera, también ofrecen una barra de desgustación de ostras gestionado por la firma Fishhh que ya posee un local propio en Barcelona y que nos permite saborear las delicadas ‘fleur des eaux’ siempre con su pan de brioche y su mantequilla.