Hay días que bien merecen un trago, un cóctel y hasta una fiesta; uno de esos días es, sin duda, el día de Sant Jordi por lo que tiene de apasionado de principio a fin; es un día para regalar amor representado en una rosa roja o contado por apasionados capítulos en las páginas de un libro y es, en definitiva, un día para decir te quiero y brindar juntos por siempre jamás. Javier de las Muelas sabe bien de la tradición catalana respecto al día de Sant Jordi y ha preparado un cóctel pensado por y para tal ocasión, desvelamos a continuación, paso a paso como hacerlo.
Cabe que pienses que en Sant Jordi se intercambian libros y rosas por azar o que en el día del libro se regalan libros porque sí pero todo tiene una explicación, una de leyenda y también literaria; el 23 de abril se despidieron del mundo Cervantes y Shakespeare -las dos figuras cumbre de la literatura en sus respectivas lenguas que son, además, las más habladas del mundo a excepción del chino-; es por esto y es por ellos que el día del libro es éste y no otro y es también por ésto y por ellos que en este día se regalan libros.
¿Y por qué rosas? porque el mismo día en el que morían Cervantes y Shakespeare, Sant Jordi salvaba a una princesa de ser devorada por un dragón; muerto el dragón por el bravo de Sant Jordi, de su herida no manó sólo sangre, también una rosa que el héroe de la leyenda entregó a la bella princesa.
Y así, por amor al otro y a las letras el día de San Jordi se regalan rosas y libros… y porque los regalos y el amor merecen siempre ser regados con una bebida espirituosa, Javier de las Muelas crea una para la ocasión, un cóctel apasionado y rojo que puedes preparar tú mismo… o degustarlo en el local de este célebre maestro coctelero en Barcelona.
En este cóctel rige la propiedad conmutativa, el orden de los ingredientes no altera el resultado final; sólo ponlos todos en un vaso mezclador y remueve a placer.
Sirve el cóctel en una copa de Martini helada y decórala con pétalos de rosas mini. Disfruta de su intenso color rojo antes de levantarla ante sus ojos y los tuyos para desearos un feliz día de Sant Jordi.
Directos al paladar. Productos tan deliciosos como difíciles de encontrar “cocinados” o embotellados, en series limitadas, bajo la vigilancia de los expertos más selectos.
