Porsche 911 1.000.000. Sabor a leyenda.

Que un modelo de coche con las características del Porsche 911 alcance el millón de unidades construidas es algo muy especial, porque desde luego no se trata de un utilitario ni de un coche destinado a ser vendido en grandes cantidades. Ese millón de unidades se debe más bien a su extraordinariamente larga vida en producción, ni más ni menos que desde 1964. Dicho de otro modo, el 12 de septiembre de 1963 se presentó en el Salón del Automóvil de Francfort una leyenda, un mito del mundo del motor que identificamos perfectamente desde la primera unidad hasta la 1.000.000 que acaba de salir de su línea de producción.

Puede que ese sea buena parte del secreto del éxito del Porsche 911, la especial combinación entre el estilo inconfundible de todas sus series de producción y la innovación constante en su desarrollo sin perder nunca la esencia que lo identifica. Curiosamente, hablando de identificar, fue una denuncia de Peugeot sobre la primera denominación del modelo, 901, la que terminó por otorgarle el definitivo 911 sobre el que ha construido su leyenda.

Como cada una de las unidades del 911, el número 1.000.000 ha salido de la factoría de la marca en Zuffenhausen, un Porsche 911 Carrera S de color verde irlandés al que, por supuesto, se le han añadido los detalles correspondientes para identificarle como todo el hito que es.

Por mucho que un modelo como este se valorase en el mercado, Porsche no tiene intención -al menos de momento- de ponerlo a la venta, aunque sí a la vista, puesto que iniciará una gira mundial para que ruede sobre carreteras y circuitos míticos de todo el planeta, tras lo que quedará expuesto en el museo de la marca en Sttutgart.

Teniendo en cuenta que en 2016 se vendieron 32.365 Porsche 911 en todo el mundo, y que existen datos para afirmar que unas 700.000 unidades del modelo todavía están en funcionamiento, tenemos 911 para rato, y es bastante posible que tengamos que hablar de futuros 911 con números tan legendarios como este 1.000.000.