Palmer Johnson rediseña el yate Niniette 66 para que sea más Bugatti Chiron que nunca.

Palmer Johnson actualiza el diseño y prestaciones del Bugatti hecho para navegar: Niniette 66, presentado en el Salón de Ginebra.

Hace poco más de un año, Bugatti confesaba sus nuevos coqueteos con el mundo náutico y lo hacía con un proyecto excepcional: una colaboración con el lujoso constructor de yates Palmer Johnson que derivó en la presentación de tres soberbias embarcaciones cuyo precio superaba los 2 millones de euros. Pues bien, esa colaboración no se ha quedado ahí, como todo lo bueno en la vida cuando se cuida y alimenta, ha ido más allá y nos trae un nuevo espectáculo sobre el agua, una edición limitada de Niniette: Niniette 66.

El diseño de Niniette 66 nace nada menos que del celebrado Bugatti Chiron que ha conquistado a tantos, a Christiano Ronaldo también, y que ahora tiene su versión náutica, un yate único de 20 metros de eslora (66 pies); claro que no son muchos los afortunados que podrán hacerse con uno de ellos no sólo por su exclusividad sino también por su precio, no sabemos todavía cual será pero si recordamos que el yate Niniette de 20 metros de eslora presentado hace poco más de un año superaba los 3 millones y medio de euros.

De lo que no nos privamos es de perdernos en la belleza de esta embarcación recogida en la galería de este artículo: un exterior deportivo y luminoso, muy azul y muy Chiron, y un interior de absoluto lujo, tanto que en Bugatti y en Palmer Johnson han decidido llamarlo santuario. Además, nos advierten que cada una de las embarcaciones que componen esta edición limitada será única porque ofrecen múltiples opciones a elegir por el propietario en cuanto a sus acabados, no habrá dos Niniette 66 iguales porque este yate no se fabrica en serie, se hace a medida y bajo petición.

Para diseñar el interior de Niniete 66, Palmer Johnson también miró el interior del Chiron y el resultado no puede ser más seductor, acogedor y elegante; se trata de un diseño contemporáneo de impactante belleza que basa su excepcionalidad en el uso de materiales naturales y de alta calidad –cuero, mármol, metal pulido, nobuck y fibra de carbono-; la armonía es absoluta en el interior de Niniette, de ahí su consideración como santuario personal, una sensación que se hace si cabe más presente en la suite principal de este yate y tampoco escapa al resto de espacios como el salón o la cocina completa. No hay que olvidar que Bugatti no sólo sabe de coches, sus colecciones de interiorismo son casi tan míticas como sus vehículos.

Otro punto a valorar es el comportamiento de este yate sobre el agua, su diseño es absolutamente aerodinámico y, con un motor Man V8 – 1000 alcanza los 44 nudos -unos 81 kilómetros por hora; puedes incluso montar un motor superior -el Man V8 – 1200- y alcanzar los 48 nudos -unos 88 kilómetros por hora-.



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Rodar… y deslizarse, volar, navegar. Y el casco más buscado, la bicicleta de look retro, el coche customizado por la firma de moda, el patín sólo apto para ejecutivos… Creaciones que transportan nuestros sueños.

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