¿Cuánto de feliz eres?
Eres tan infeliz como cosas percibes que te faltan. Eres tan feliz como agradecido estás por lo que tienes y disfrutas.
¿Eres feliz? ¿Cuánto? Estas pueden parecer dos preguntas relativamente frecuentes, y por ello tal vez tendemos a dar una respuesta rápida relacionada con la emoción que tienes en ese momento. ¿Pero es eso la felicidad? cómo nos sentimos en un momento dado, o ¿está más relacionado con el estado generalizado de cómo nos sentimos con nuestra vida?
Acompáñame a profundizar más en estas dos preguntas, porque de su respuesta puede depender tu sonrisa, ¿no crees?
Efectivamente sentirte feliz o no, se relaciona directamente con cómo te sientes en cada momento, y cómo te sientes en cada momento se relaciona directamente con dónde estás poniendo la atención. ¿El vaso está medio lleno o medio vacío? ¿Es genial que tengas una casa donde dormir, o es un asco porque tu casa no sea de 500 metros cuadrados?
Poner la atención en lo que nos falta, en lo que deseamos y no tenemos, en lo que queremos y aún no hemos logrado, no hace más que llevarnos a sensaciones negativas, y no nos deja ver lo que sí tenemos. Este comportamiento una vez aprendido, da igual que seas desempleado, que el presidente de la mayor empresa, siempre podrás seguir fijándote en lo que quieres y no tienes, en un caso puede ser cualquier tipo de coche, en el otro caso puede ser un barco de más metros, pero el resultado es el mismo, infelicidad. Aun cuando mucho más del 50% de los seres humanos del planeta te envidien (en el buen sentido) por todo lo que tienes, y que incluso consideren tu vida como una vida de disfrute y felicidad.
Una forma de acercarse y vivir en esa felicidad, es tomar conciencia de lo que tenemos y ser agradecidos por ello, ¿cuándo fue la última vez que fuiste consciente de todo lo que tienes a tu alrededor (personas queridas, estilo de vida, amor, etc.) y diste las gracias por ello? ¿qué sensación te queda cuando en lo profundo de ti, agradeces algo de lo que tienes o disfrutas?
Te invito a que hagas una lista en papel, no vale que sea mental, en papel, de las cosas que podrías agradecer, y después que aunque sea en silencio, en tu interior des las gracias por tener y disfrutar cada elemento de esa lista. Hazlo mínimo una vez al mes, y si quieres una vez al día sería muchísimo mejor, de ello puede depender tu felicidad.