Cualquier tiempo pasado pudo ser peor.

Da la impresión que vivimos tiempos revueltos, aunque en verdad vivimos tiempos bastante tranquilos si los observamos con los ojos de las personas que han vivido una guerra, distancias que ahora recorremos en horas y entonces eran días, incluso semanas.

Antes faltaba información, ahora nos sobra, nos empacha. Antes la oportunidad era difícil encontrarla más allá de tu barrio porque no eras capaz de ver más allá, hoy puedes encontrarlas desde la comodidad del sofá y una conexión a Internet.

Aun así, muchas personas en su momento han sabido reinventarse, crearse a si mismas, muchas de ellas incluso sin formación adecuada han sabido abrirse camino y superar barreras que a nosotros nos parecerían infranqueables en estos tiempos «revueltos».

¿Cuántas personas tienes a tu alrededor que ya tengan o superen los 70 años?

Te invito a que te hagas un regalo, pregúntales cómo fue su vida, qué barreras tuvieron que superar, cómo se enfrentaron a sus miedos, cuáles eran, cómo ven su vida ahora desde su actual vida, y en especial, pregúntales qué cosas volverían a repetir.

Y también te invito a que les hagas un regalo, escúchales, si, parece obvio, pero muchas veces oímos y sin embargo no escuchamos. Hazles el regalo de desconectar teléfonos, apagar la televisión, etc. el obsequio de prestarle absoluta atención con todos tus sentidos.

Hace unas semanas conocí a una pareja de enamorados que me contaron cómo se conocieron y vivieron su relación desde hace más de 60 años, es increíble ser testigo de una aventura así, de cómo se enfrentaron a situaciones en las que un manjar y alimento calórico era «medio trozo de paz untado con un higo», tenemos verdadera inspiración a nuestro alrededor, solo hemos de abrir los ojos y los oídos.