Olivier Theyskens, cambio de teorías.
Pasión y talento a la antigua usanza.
Ya lo decían sus profundos ojos y su melena extra-lista, la misma que le aporta esa especie de aura que da a entender que a su lado nada malo puede pasar. Theory creyó en él durante tres años y ahora es el propio Olivier quien decide seguir repartiendo virtud y talento por el sector de la moda. Porque el hijo de un químico y una ama de casa se ha convertido en unos de los diseñadores más aclamados del siglo XXI gracias a su extrema sensibilidad a la hora de convertir en obras de arte todo aquello que toca o dibuja.
El genio encargado de revivir los orígenes de Rochas comenzó sus andanzas en la Escuela Superior de Artes Visuales de La Cambre. Algo que no le inspiró mucha confianza, en parte debido a su falta de paciencia, por lo que decidió comenzar a hacer trazos que acabarían haciendo suspirar a Madonna. Una trayectoria que comenzó de la única manera posible dentro de la vida de alguien tan personal y entregado como Olivier Theyskens. Porque cuando a los 7 años tienes tan claro que lo tuyo es la High Couture, lo único que te queda por hacer es volcarte de lleno en ella.
Firmas como Nina Ricci han tenido el placer de contar con la visión melancólica de este belga que, a pesar de las imposiciones en el mundo de las ventas, ha intentado con todas sus fuerzas establecer el carácter soñador que le corresponde a la alta costura. A Theory llegó en el 2011 para hacer una colección cápsula que le permitió dedicar el tiempo y la pasión que siempre había buscado. Un trabajo que aumentó más del 20% los precios con los que por entonces trabajaba la marca pero que, sin duda alguna, mereció la pena, ya que gracias a ‘Theysken’s Theory’, nombre con el que coronó esta colaboración, el otoño de ese mismo año pasó a convertirse en el director creativo.
Alguien que busca la armonía entre las ideas bien plasmadas y su proyección perfecta en un mundo donde lo único que importa es el tiempo… Un privilegio que probablemente haya hecho que Olivier busque nuevas teorías con las que dar rienda suelta a la gran nostalgia de los clásicos pertenecientes a la moda.