Milano que suena mejor.

Milán es la capital de la moda...

Las semanas de la moda tienen ese efecto rebote que las ciudades intentan evitar en todo momento, cruzando dedos para que cuando les llegue el turno la gente no ande cambiando el armario, con un método que no siempre parece ser el más adecuado. Aun así uno siempre cuenta con su ‘Olimpo’ preferido, aguantando como puede que pasen el resto de días, firmas, outfits, revistas, webs y todo el lío que conlleva el evento en cuestión, para que, llegado el momento, los nervios estén intactos y la ilusión también.

Aunque no es mi caso, a pesar de que lo intente, siempre sonrío ante la idea de que la semana de la moda de Milán se acerca, a pesar de estar más que contaminada a esas alturas con tonos pasteles, sirenas, gasas y demás.  Algo que, por cierto, complica bastante las cosas cuando uno ya ha sido testigo de más de 20 días de tendencias que, por lo que parece inevitable, encuentran cabida en cada desfile.

Pero Milán es la capital de la moda. Es la pasarela que alberga las propuestas de algunos de los diseñadores más importantes del sector, con escaparates reservados en algunas de las calles principales, exclusivamente para ellos. Es la ciudad que obliga a tomar por nombre el de sus propias raíces, Milano y que, independientemente de las fechas otorgadas, siempre provoca esa sensación de asombro y novedad en el que sabe disfrutarla.

Algo que se ha vuelto a demostrar a lo largo de estos días con las presentaciones de lo que será el próximo primavera-verano 2014. De ello se encargó Miuccia Prada y sus mujeres-murales. Un recordatorio del puro estilo streetwear con estampados callejeros que utilizan por lienzo abrigos de piel y vestidos en los que el toque de la firma llegaba con la combinación de paillettes. Algo que, sin duda alguna, irá más allá de las pasarelas.

La calle se convierte también en la inspiración para Donatella Versace, con piezas que destilan la filosofía desenfadada y algo ‘agresiva’ de la firma pero que, en esta ocasión, parece ‘endulzarse’ con vistas al romanticismo de la silueta femenina. Sin duda una demostración de que la firma italiana es algo más que una marca centrada en el lado sexual y provocador de la mujer.

Armani apostó en ‘Lights and Shadows’ por algo bastante menos veranigo en comparación al resto de diseñadores. Algo muy útil para ponerle solución a los maleables días de primavera y que, en la mayoría de ocasiones, pasan desapercibidos en las pasarelas. Eso sí, los amantes de lo clásico estarán encantados pero estoy segura que los que esperaban algo de innovación se han quedado con la miel en los labios.

Dolce&Gabbana continúa con lo que parece una eterna novela histórica sobre Sicilia. Los detalles son exquisitos y los diseños cuidados hasta el más mínimo punto pero al tratarse de una firma tan consolidada quizá es hora de plantearse nuevos horizontes inspiracionales.

Ferragamo y Ferre fueron los principales responsables de que la sobriedad y el toque masculino no faltasen en los desfiles. Drapeados y colores claros para ponerle fin a una de las pasarelas más importantes del mundo y decirle adiós al arte hasta la próxima temporada.



Oops

La versión más personal de todos nosotros, los que hacemos Loff.it. Hallazgos que nos gustan, nos inquietan, nos llenan, nos tocan y que queremos comentar contigo. Te los contamos de una forma distinta, próxima, como si estuviéramos sentados a una mesa tomando un café contigo.

Bataclan.

El cálido manto de la fiesta pintada con maquillaje caro y música en directo ocultaba la sangre derramada, el dolor pasado, las ausencias presentes... Estaban en Bataclan. + ver

Newsletter

No te pierdas nada, que saber no ocupa lugar.

Salir de la versión móvil