Las novias de García Lorca.

Algo está cambiando. Primero fue el largo, luego el color y ahora el trasfondo. Las novias del siglo XXI han abandonado su afán de convertirse en ‘mujeres de blanco’ para trasladar dos sentimientos hacia el altar: el suyo y el del vestido que llevan. Se trata de uno de los detalles más deseados por casi todas las mujeres y una de las claves que nunca deben fallar. Algo que ha hecho que los diseñadores se replanteen la función de sus creaciones y les ha llevado a dar rienda suelta no solo a su creatividad, sino a las historias que le inspiran y que pasarán a formar parte de una nueva vida.

Este es el caso de Beatriz Peñalver, una joven diseñadora granadina que ha hecho de Almuñecar, su ciudad natal, todo un referente en patrones y vestidos para novias especiales que buscan algo totalmente alejado de lo convencional, donde la elegancia y la originalidad sean dos conceptos que combinen a la perfección.

El Jardín de las Morenas es su primera colección, con una inspiración 100% andaluza no solo en las formas, sino también en el contenido. El famoso poema de Federico García Lorca fue el punto de partida de una propuesta que hace de la poesía y el nácar dos términos unidos por una misma pasión. La madreperla es el material que despunta entre sus vestidos, con incorporaciones en cuellos, hombros y puños, haciendo de ellos un auténtico homenaje a Andalucía. La seda, la organza y el encaje son algunos de los otros materiales que han dado forma a toda una aventura en la carrera profesional de Beatriz.

Cinco piezas que trasladan el sentimiento de Peñalver a las novias amantes de las tendencias y el diseño único, que creen en una figura femenina marcada con volúmenes en hombros y caderas y que desaparece a la altura de la cintura.

Una novia especial que hace de García Lorca y de Beatriz Peñalver una decisión acerta para presentarse ante el día más especial de su historia…