Leica Watch L1 y L2: de las legendarias cámaras de fotografía a los relojes.
Leica, la legendaria firma que revolucionó la fotografía a principios del siglo XX, entra de lleno en el mundo de la relojería con los Leica L1 y L2.
Leica, la legendaria firma que revolucionó la fotografía a principios del siglo XX, entra de lleno en el mundo de la relojería con los Leica L1 y L2. Esta vez no se trata del típico accesorio, realizado por terceros, con el que muchas firmas de lujo complementan su producto principal. Leica Watch es todo un proyecto paralelo al de las cámaras fotográficas que se viene cociendo co el máximo sigilo desde hace años. Prueba irrefutable de ello es la nueva sociedad Ernst Leitz Werkstätten, creada solo para este proyecto, cuyas instalaciones ocupan una importante superficie en el moderno e impresionante complejo Leitz-Park.
La incursión de Leica en el sector de la relojería mecánica ha creado un auténtico revuelo y puede haber sorprendido a más de uno. Pero si lo analizamos fríamente, hay muchas similitudes a nivel de conocimiento entre las legendarias cámaras Leica M y la relojería. El corazón de ambos campos es el dominio de la micro-mecánica, con especial énfasis en la precisión y la fiabilidad. Por tanto, el desarrollar y fabricar componentes mecánicos de tamaño reducido no es ajeno a Leica ya que forma parte de su historia, que pronto cumplirá un siglo. Por si fuera poco, hay un dato conocido por pocos que suena a premonitorio; Ernst Leitz, fundador de Leica, trabajó como relojero en Suiza antes de lanzar las legendarias cámaras fotográficas que cambiarían el mundo de la comunicación.
Leica no ha recurrido a firmas ya existentes para el desarrollo o la manufactura de sus nuevos relojes. Se trata de un proyecto (ya realidad) 100% autónomo, cuyo primer resultado son los calibres L1 y L2, que dan vida a los relojes del mismo nombre. Se trata de movimientos de carga manual que ofrecen una respetable reserva de marcha de 60 horas. El L2 se diferencia del L1 en que añade una función de doble huso horario a las indicaciones de horas, minutos, segundos, fecha e indicador de reserva de marcha de este último. Ambos relojes aportan una innovador sistema de ajuste de las indicaciones, mediante una corona con la que se puede seleccionar la función que ajustará sin necesidad de extraerla. Un indicador ubicado en la esfera nos indica siempre cual es la función seleccionada.
De momento se conocen pocos detalles en cuanto al método de distribución que empleará Leica para llevar sus relojes al público. Lo que sí se conoce es que los precios de estos Leica Watch partirán aproximadamente de los 10.000 euros. Todo un aviso a navegantes ya que con ello se inscriben en uno de los segmentos más competitivos de la relojería de alta gama. Puede que muchos sean escépticos en cuanto al éxito de Leica en el sector relojero. A mí no me cabe ninguna duda. Se puede decir que nací con una Leica bajo el brazo y se de los que son capaces los de Wetzlar.
Más información